Presentarán una lista de nombres a la Presidenta electa para los diversos cargos, tanto regionales como ministeriales.
Dentro de todos análisis que realizan por estos días los partidos de la Alianza, tanto en RN como en la UDI se espera también para este año las definiciones de sus nuevas directivas nacionales. En ambos casos han surgido nombres que lideren los respectivos procesos de partidos. En el caso del gremialismo son tres los nombres que aparecen como probables cartas. Se habla de Juan Antonio Coloma, el diputado Ernesto Silva y el senador Víctor Pérez Varela.
Este último, contactado por diario El Sur no quiso confirmar ni descartar el hecho. En este sentido dijo que para encabezar un proyecto político debe existir primero un delineamiento del mismo y, sólo ahí, definirse a la figura política idónea para asumir el desafío. Pérez afirmó que "quienes ocupen cargos de relevancia, es secundario, y va a venir luego de este proceso de análisis del cuál es nuestro proyecto político y discurso para los próximos cuatro o cinco años. No nos debemos desviar de eso para poder presentarnos a la ciudadanía con claridad respecto a lo que queremos para la UDI y para Chile".
-Esas son más bien especulaciones de prensa. En lo personal, y todos los dirigentes de la UDI, estamos trabajando fuerte en lo que será nuestro consejo directivo ampliado el próximo fin de semana, nuestros consejos regionales de marzo, el consejo nacional de abril y en algún mes del año nuestro consejo programático, y crear las condiciones para modernizar y actualizar nuestro proyecto político y fijar pautas para ser más eficaz. Pero, sobre todas las cosas establecer fórmulas con carácter y voluntad política de revertir el mal resultado que tuvimos en la elección presidencial.
-He conversado con gente de la UDI. He estado también con gente de la Región del Bío Bío y otras regiones. Eso lo catalogo más bien como de medios periodísticos que una real competencia. Todos más bien estamos trabajando en lo que consideramos esencial que es tener un proyecto político. No sacamos con tener una fórmula de dirigentes sino tenemos un proyecto político modernizado, convocador y una organización eficaz.
--No me quiero anticipar a los momentos. Hemos conversado el tema de quién es el que asumirá ese liderazgo, pero eso llegará en su momento. Hoy día el tema es qué vamos a hacer, qué vamos a estructurar y cuál va a ser nuestra pauta. Para eso es el tiempo ahora. En lo personal estoy haciendo eso y estructurando toda mi labor como senador de Octava Cordillera, estableciendo mis equipos. Esa es mi preocupación y acción más directa. No he pensado en tomar posiciones de carácter más nacional, lo que sí puedo decir que vamos a contribuir a que el nuevo proyecto político convoque y motive, además de ser una organización que lo haga posible.
-Para nada. Hay una dicotomía falsa. No hay duda que tenemos que renovar nuestro proyecto político y nuestra estructura y hasta nuestras prácticas políticas. Eso se hace con los activos, con los nuevos o con los que vienen. Todos. A mí me llama mucho la atención que se hable de esto ya que si uno analiza a quienes se les asigna ser parte de una nueva generación, todos o casi todos tenían puestos en la dirección política de la UDI. Por lo tanto, cuando yo hablo de renovar, lo hago del proyecto, estructura o prácticas, que no hay duda que hay que renovarlas o modernizarlas. No veo que exista esta dicotomía en la UDI entre jóvenes y viejos
--Creo que pueden ser comentarios en que no se hace una adecuada lectura de lo que nos pasó. Por lo tanto, si uno no tiene un acertado diagnóstico de la UDI, de los errores que se cometieron y lo que tenemos que rectificar, puede equivocarse. Pero, estoy optimista porque las conversaciones que hemos tenido con diversos dirigentes del partido, a lo largo del país, los veo en la perspectiva de nuestro nuevo discurso y proyecto político.
--Los resultados electorales también son una radiografía del momento. Hace cuatro años logramos el 51% e hicimos un gobierno realizador. No tuvimos la capacidad política de reencantar a la gente y bajamos al 38%. Eso es claramente una lección y en la medida que uno aprenda adecuadamente de ella, va atener la posibilidad de proyectarse al futuro. En lo personal y en la UDI, tenemos la voluntad de volver a ser mayoría y de ganar. Eso significa escuchar mucho y ser escuchado. Significa recoger y entregar planteamientos junto a las organizaciones. Ese es el gran desafío. Soy un convencido que esto es una tarea colectiva. Si hay proyectos que privilegian lo personal sobre lo colectivo, van a fracasar. Cuando leo a muchos, incluido al Presidente, hay un entendimiento de eso.