Hubo una mejoría en el número de ocupados en relación a igual trimestre de 2012 en la categoría asalariados.
Un 7,3% fue la tasa de desocupación que registró la Región del Biobío en el trimestre septiembre-noviembre, inferior 0,5 puntos porcentuales respecto a igual trimestre de 2012 y 0,2 puntos porcentuales al trimestre agosto-octubre de 2013, de acuerdo a lo informado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Con esto la Región del Bío Bío presenta la tasa de desocupación más alta del país para el trimestre en análisis. Coronel con una tasa de 12,2%, seguida de Lota, con un 9,5%, lideran el desempleo nacional.
Las ramas de actividad económica que presentaron la mayor incidencia negativa en la ocupación en doce meses fueron Industrias Manufactureras; Hogares Privados con Servicio Doméstico; Agricultura, Ganadería, Caza y Silvicultura; Servicios Sociales y de Salud; y Otras Actividades de Servicios Comunitarios, Sociales y Personales.
En tanto, las ramas que suavizaron la pérdida de empleo fueron Transporte, Almacenamiento y Comunicaciones; Comercio al por Mayor y al por Menor; Explotación de Minas y Canteras; Enseñanza; Actividades Inmobiliarias, Empresariales y de Alquiler; e Intermediación Financiera.
Respecto a las categorías de ocupación en doce meses, Personal de Servicio, Cuenta Propia, Empleadores y Familiar No Remunerado incidieron en la caída del empleo. Mientras, la categoría Asalariado atenuó la disminución de los ocupados en comparación con igual trimestre de 2012. El porcentaje de Asalariados con contrato escrito aumentó 2,2 puntos porcentuales en doce meses y bajó 1 punto porcentual en relación al trimestre anterior.
La tasa de presión laboral, que mide a los desocupados más las personas con trabajo que buscan otro empleo, fue de 15,9% fue inferior 0,2 puntos porcentuales respecto a igual trimestre de 2012 y 0,5 puntos porcentuales en relación a agosto-octubre de 2013.
Al comparar con igual trimestre de 2012, la tasa fue inferior en 0,2 puntos porcentuales y 0,5 puntos porcentuales en relación a la del trimestre anterior. La disminución anual se ve influida principalmente por la caída de la fuerza de trabajo y de los desocupados.
Se observaron 75.260 personas ocupadas que buscan un segundo empleo, cifra menor en 1.100 personas (1,4%) que igual trimestre de 2012 y 3.290 menos ocupados que buscan un segundo empleo (4,2%), en relación al trimestre anterior.
Al comparar con igual trimestre de 2012 los desocupados disminuyeron en casi todos los niveles de educación; se destacan los desocupados con estudios de Educación Secundaria (7,3%) y con Educación Primaria nivel 1 y 2 (16,1%).
Asimismo, Educación Universitaria (20,8%) y Formación de Doctorado, Postítulos y Maestría (49%). Mientras, Educación Técnica (3,1%). En el trimestre de análisis, la mayor tasa de desocupación según nivel educacional corresponde a las personas con nivel Técnico No Universitario de 9,2%. Le sigue la tasa de nivel Secundario que fue de 7,9%. Mientras, la tasa de personas con nivel Universitario fue de 6,6%.
Al analizar las cifras con el tipo de contrato, en el trimestre de análisis el 83,9% de los asalariados tiene contrato escrito, 2,2 puntos porcentuales más a la de igual trimestre de 2012. De éstos, el 39,5% tiene contrato definido y el 60,5% tiene un contrato indefinido. Mientras, los trabajadores dependientes por rama de actividad tienen diversas tasas de cobertura de contrato escrito.
El sector Intermediación Financiera tiene el 99,1% de sus 7.680 trabajadores con contrato escrito. Le sigue Explotación de Minas y Canteras, con el 97,9% de sus 18.480 trabajadores. En tercer lugar están los trabajadores dependientes de la rama Electricidad, Gas y Agua que el 96,8% de las 9.110 personas que la componen tienen contrato escrito. En el caso de Enseñanza, el 95,3% de sus 73.880 empleados posee contrato escrito. En tanto, las ramas en que los ocupados dependientes mantienen mayoritariamente acuerdos de palabra son Hogares Privados con Servicio Doméstico, con el 62,3% de los 41.150 trabajadores; y Pesca, en que el 54,6% de los 5.240 dependientes sólo tienen un acuerdo de palabra con su empleador.
Según cifras de Hay Group, en 2014 la masa salarial en Chile crecerá 5,25%, es decir, más aceleradamente que nuestra economía (4,5% según el FMI), lo que es un escenario negativo para el mercado laboral chileno. Esto, porque no existe un país capaz de solventar un crecimiento de sueldos tan precipitado, por más eficiencia interna que gane una compañía a nivel de procesos y optimización de costos; y porque rentas elevadas generan mayores costos de producción , por tanto menos ganancias y pérdida de competitividad para el país.
En minería, en 2009 Chile se encontraba en el séptimo lugar en competitividad, bajando al octavo en 2010, al 18º en 2011 y al puesto 23 en 2012 (*cifras Instituto Fraser, Canadá). Por eso hoy uno de los temas prioritarios de las compañías es el control de costos y la optimización de los procesos productivos, además de la capacitación de sus trabajadores, técnicos y profesionales, ya que el alto costo del recurso humano no ha ido acompañado de mejoras y aumentos de productividad.
El alza desmesurada en los salarios se debe en gran parte, al déficit de profesionales en ciertos sectores, por lo que la llegada de extranjeros al país es un factor que regularizará el mercado laboral, debido a que si se flexibiliza el límite de contratación de foráneos, se acortaría la brecha entre la oferta y la demanda y las rentas se normalizarán.
Otra de las soluciones a este problema es la flexibilidad laboral, específicamente aumentar la demanda de trabajo temporal y se debe complementar con leyes que respalden y estimulen la contratación de mujeres, universitarios y grupos menos demandados cuando el mercado laboral se encuentra estable; lo que mitigaría los problemas de escasez de mano de obra y por ende el aumento desmedido de los salarios.
Pedro Lacerda
CEO Randstad