El impacto de la mayor oferta del gas natural
El gas natural es uno de los combustibles más usados por la humanidad, desde la calefacción de hogares hasta insumo en la industria petroquímica, para fabricar diversos bienes requeridos por los seres humanos, incluyendo su uso masivo como combustible vehicular.
Desde mediados de los años 2000, en Estados Unidos y Canadá se masifica una tecnología que permite obtener gas natural desde las rocas o esquistos, denominando así al producto o gas no convencional. Hoy la producción de representa cerca del 35% de la producción de gas natural total de EE.UU. y se espera que antes de 10 años se eleve al 45%. El efecto que esta tecnología ha tenido en el precio de la energía y en la competitividad de la economía estadounidense ha sido muy importante y por ello en ese país se habla de "la revolución del .
La profusión de este recurso en el mercado interno de EE.UU. ha originado además el pedido de licencias de exportación. Existen dos licencias de exportación ya otorgadas por las autoridades y más de 20 solicitudes han sido presentadas en 2013. No deja de ser notable que mientras EE.UU. construyó en el pasado costosas instalaciones para importar gas natural desde diversos países, ahora está construyendo instalaciones para exportarlo.
Pero no sólo en Norteamérica existe este recurso. Estudios patrocinados por el Departamento de Energía de Estados Unidos muestran que ya está presente en varios otros países. Datos del mismo Departamento de Energía dan cuenta que el técnicamente recuperable podría llegar a unos 7.201 trillones de pies cúbicos, que puede compararse con un consumo mundial de gas de 124 trillones de pies cúbicos por año.
Encabezan la lista de naciones con reservas mundiales del recurso, China (1.115 trillones), Argelia (707 trillones), Canadá (573 trillones), Estados Unidos (567 trillones) y Argentina (802 trillones). Chile dispondría de unos 48 trillones de pies cúbicos, en la zona austral.
La producción de implica entre otros factores, poseer la tecnología para realizar las perforaciones. Esta tecnología es bastante más compleja y mucho intensiva en capital que la producción de gas convencional, por lo que para que pueda existir un aprovechamiento real de los recursos potenciales, se requiere acceso a fuentes de capital de manera relevante.
En Argentina, el yacimiento de Vaca Muerta, descubierto por YPF en el 2010, mostró que existían en ese país recursos de gas no convencionales, los cuales se suman a los ya importantes recursos de gas convencional. Vaca Muerta es sólo parte de los abundantes recursos de energía que cuenta el país trasandino.
El efecto combinado de las exportaciones norteamericanas y de los descubrimientos de nuevos recursos de gas no convencional en el mundo, podrían hacer que el precio internacional del gas natural de los próximos años fuera muy atractivo para los países compradores de este energético, generando así un escenario potencialmente parecido al que se ha dado en los últimos años en el mercado interno de EE.UU.
Chile cuenta con dos terminales de recepción de gas natural licuado en Quintero y en Mejillones y existen otros proyectos similares, todo lo cual permitiría aumentar las importaciones de este energético en los próximos años.
Chile, un país importador neto de energía y que requiere de este vital elemento para permitir sus distintas actividades productivas y para abastecer sus hogares, así como posibilitar el crecimiento económico y desarrollo humano, debe seguir atento y de cerca la evolución del fenómeno y proactivamente tratar de aprovecharlo al máximo, brindando todas las facilidades para su importación y para su uso de manera eficiente y ambientalmente responsable en las diversas aplicaciones.