Contradicciones y omisiones en el debate
El debate de la Archi estuvo marcado por contradicciones y omisiones por parte de las candidatas, en especial en el tema valórico y en los temas país, dando lugar a un encuentro con escasa claridad y con poca capacidad de aportar para entender las verdaderas visiones de la sociedad que ambas candidatas desean construir.
Así por ejemplo, cuando Michelle Bachelet se calificó como alguien que cree en la igualdad como principio básico en la construcción societal, situación que ejemplificó con el apoyo que entregó al matrimonio homosexual, cayó en clara contradicción al no apoyar abiertamente la posibilidad de que las parejas de un mismo sexo tengan el derecho a la adopción.
Es importante señalar que alguien que apoya la igualdad de derechos debe entender que su definición se debe demostrar con una defensa irrestricta de esta condición, entendiendo la igualdad como un valor absoluto que no puede estar condicionado a factores discriminadores, situación que no se logra visibilizar con la declaración de Bachelet.
A su vez, cuando la ex Presidenta contestó la pregunta: ¿mantendrá en el cargo a Felipe Bulnes ante la demanda que Bolivia interpusiera en el Tribunal Internacional de La Haya? Su respuesta relativa a que hay que evaluarlo da cuenta de la poca claridad que se ofrece a la ciudadanía en un tema tan relevante como la soberanía nacional. La experiencia indica que Michelle Bachelet, de haber tenido la intención de dar continuidad al proceso que hoy lidera Bulnes, lo hubiese señalado, ya que eso la hubiera posicionado como alguien que entiende que el tema es una política de Estado.
En consecuencia, es posible prever que en el caso de Bolivia contra Chile habrá un nuevo agente después de la casi segura llegada de Bachelet a La Moneda, lo que obviamente no se explicitó por las duras críticas que esto le hubiera significado.
Respecto a Evelyn Matthei, y en su intento por conseguir nuevos apoyos, la candidata de la Alianza desconoció sus propias palabras cuando dijo que ella no legislará en ningún tema que fuese contrario a lo establecido en la Biblia. En ese sentido, su posición actual respecto del aborto no se condice con lo que ella misma declaró en el pasado reciente, cuando sostuvo que en casos de violación el aborto se mostraba como una alternativa que habría que estudiar y que ella misma apoyaría.
A su vez, cuando la candidata de la Alianza se protegió de la interpelación que le hizo Bachelet en cuanto a que los niveles de crecimiento de la economía que Matthei proyecta no son los que permitirían sustentar su propio programa de gobierno, la candidata oficialista señaló que no importa el nivel de crecimiento económico que tendrá el país a la hora de implementar su programa de gobierno. Eso es un grosero error conceptual, induciendo a la ciudadanía a esperar el cumplimiento de promesas de campañas que no podrán materializarse. Ello porque las herramientas sobre las que se sustentan todas las políticas públicas se basan en la viabilidad económica, situación que se logra en virtud de un análisis hecho en el ejercicio presupuestario anterior y que considera siempre las proyecciones relativas al crecimiento de la economía nacional.