Teatro Negro de Praga trae su "Antología" de sorpresas
Aún quedan entradas para el espectáculo que extrae en 10 momentos la historia del grupo formado en 1961 y que hasta el presente está dirigido por Jirí Srnec, quien ha buscado efectos narrativos y la emoción del público con objetos y actores en armonía.
La última vez que el Teatro Negro de Praga estuvo en la capital del Bío Bío fue en 2008, ocasión en que la compañía formada en 1961 desplegó su magia en el Teatro UdeC, escenario que se ajustó muy bien a una de las exigencias condicionantes del director Jirí Srnec: Oscuridad total del espacio.
Frente a ese detalle, el grupo formado por 11 actores y tres técnicos puede estar tranquilo. Esto en relación a la misma condición exigida y que se cumple en el Gran Salón de SurActivo. "Se cierra la puerta y todo queda totalmente oscuro", comenta Sergio Cichero, productor que por segunda vez trae al grupo checo a nuestra ciudad. El show de una hora y 45 minutos está agendado esta tarde, a las 20.30 horas.
Ciertamente, se espera la función se desarrolle a tablero vuelto, pues de las 900 entradas que se pusieron a la venta -valores entre los 15 y 28 mil pesos- quedaban alrededor de 200 disponibles al cierre de esta edición.
"Esperamos un público de carácter familiar el que llegue mañana (hoy), según lo que pudimos palpar cuando los trajimos hace cinco años", comentó Cichero.
Respecto a las condiciones del lugar y la complejidad que represente frente a un espectáculo de este tipo, el representante de Sono apuntó que ellos estaban acostumbrados a montajes teatrales.
"Nosotros montamos el escenario, pero la Caja Negra la traen ellos, que es la esencia de todo esto, además de una alfombra de felpa especialmente acondicionada", indicó sobre este montaje donde detalles como la iluminación juegan un rol clave para crear la atmósfera de luces y sombras.
UN PASEO POR LA HISTORIA
En esta ocasión, el montaje que se va a presentar es "Antología", momentos que -adelantaron los involucrados- van a ofrecer un rato de fantasía, sueños y arte al público. "Lo que presentamos en esta ocasión se estructura en base a 10 sketches, pequeñas historias que conforman el Teatro Negro de Praga", apuntó de Jirí Srnec.
Acotó que las casi dos horas estaban ideadas para cautivar a toda la familia. "Es algo nuevo y diferente a lo que mostramos en Concepción en 2008, ya que también la compañía tiene nuevos integrantes. Esto hace que todo sea nuevo y que sea un teatro distinto", explicó.
- En general, los latinoamericanos, y por ende los chilenos, conforman un público perfecto, en el sentido que siguen el espectáculo, participan, incluso, entienden y se ríen con las bromas que hacemos. Son muy participativos, activos. Eso hace que se genere una influencia especial en cada presentación.
- Creo que en general está en lo original de las ideas creadas con una técnica y detalles propios. A todo eso se suma la imaginación que surge para jugar y seguir las historias que presentamos. Es una cuestión muy lúdica, a veces, también infantil e inocente.
Recordemos que la técnica con que se desarrolla la puesta en escena, efectivamente hace que el espectador se deje llevar por un relato que se torna mágico a la mirada, asumiendo su verosimilitud. Esto, a partir de una estética particular, mucho de caricatura, humor y personajes que se tornan adorables.
"La compañía de Jirí Srnec convierte el espacio escénico en un ilimitado lienzo negro, donde sus magos, mimos, payasos, acróbatas, actores, marionetistas y bailarines se expresan en el lenguaje universal del cuerpo, sin diálogos, en exquisitas y asombrosa sesiones de plástica y magia teatral", es el llamado de los productores.
El Teatro Negro de Praga llega al Bío Bío en el marco de sus 50 años de trayectoria. "Esto se enmarca en la gira internacional que la compañía está realizando por distintos países de Latinoamérica", señalaron los encargados.
Destacaron que el reciente paso por Santiago -cuatro días en el Teatro Municipal de Las Condes- avala la calidad del espectáculo que se va a presentar en nuestra zona.
, el Teatro Negro de Praga llamó la atención desde sus inicios como una agrupación de calidad artística excepcional, superando en proyección a la mayoría de sus contemporáneos. Esto, ha dicho la crítica, se debe al principio que le impuso su fundador y director artístico , basado en el aprovechamiento creativo de un truco sencillo: La Caja Negra.
La técnica se asume con actores vestidos de negro que no se ven sobre el fondo negro, quienes dan vida y movimiento a cosas y objetos. Este principio se acerca mucho a la narrativa cinematográfica, especialmente, la de sus inicios practicados por . El director que trastocó así la realidad trabajaba con el fondo negro apelando a la complicidad del espectador.