Las cerca de 300 personas que escucharon con gran placer y respeto las canciones interpretadas por Daniel Lencina y Valentín Trujillo, en el nuevo "Café Ceres" de la Plaza Independencia, durante una media hora; se transformaron en unas dos mil ya entrada la tarde de ayer, en el corazón de la capital regional. El público se preparaba así para el cierre de la Fiesta de Todos con el ritmo de Tommy Rey.

La iniciativa organizada por el municipio de Concepción, cumplió con su más básico objetivo: Hacer de este espacio urbano un lugar de encuentro familiar penquista. Un domingo que, según era el comentario, muchos esperan sea el primero de varios durante el año.

"Lo que pasa es que esto nunca se murió, sólo estaba dormido", comentó Valentín Trujillo, ilustrando así el gran movimiento artístico y cultural que siempre ha tenido la capital del Bío Bío.

"Es muy positivo ver a una cantidad importante de gente joven, lo cual muestra que en el movimiento artístico hay mucho futuro acá. Concepción tiene una larga vida en esto por delante", saludó el músico y pianista de 80 años, de madre penquista (Clementina Sánchez) minutos antes de subir al escenario dispuesto alrededor de un conjunto de mesas en el sector de la fuente de la diosa Ceres.

Junto a su compañero de rutas hace dos años, el trompetista Daniel Lencina, fueron los encargados de abrir esta fiesta ciudadana.

"Estoy verdaderamente sorprendido con todo esto. Esto retrotrae el tiempo de las mejores épocas de esta ciudad. Jóvenes y adultos comparten alrededor de la música y el arte en el aniversario de una ciudad tan hermosa y significativa como Concepción", comentó el músico uruguayo nacido en 1938 y radicado en nuestro país desde 1972.

Recordó tiempos significativos ligados al jazz, entre ellos, cuando tocó por primera vez en Chile este ritmo, en el Aula Magna de la Ucsc.

También convocó la participación de la compañía teatral La Otra Zapatilla, el dúo Traversa, Niño Cohete, Julius Popper y la agrupación liderada por Patricio Zúñiga (Tommy Rey) desde 1982.

"Para nosotros esto significa cerrar el aniversario (número 463) de Concepción con optimismo. Ésta es una ciudad hecha una fiesta", apuntó el alcalde Álvaro Ortiz.

El edil sumó, además, que este tipo de eventos se enmarcaban en el mediano y largo plazo en el plan Concepción 2030. "La invitación es trabajar en la ciudad que le vamos a heredar a las futuras generaciones soñada por todos", señaló.