¿Los adultos mayores pueden tomar leche? Ésta es una de las preguntas que pueden surgir a la hora de pensar en si se le está administrando una correcta alimentación a nuestros seres queridos que están en esa etapa de la vida.

En ese sentido, los productos lácteos son recomendables en todas las etapas de la vida, incluso en la vejez, salvo que la persona sufra alguna patología.

Lo importante, a tener en cuenta, es que en general, ellos tienen que llevar una dieta equilibrada y lo más variada posible.

"Deben tener una alimentación que incluya diversos alimentos y que cumpla con todos sus requerimientos nutricionales, pero se debe disminuir el consumo de té y café porque alteran el sueño y son diuréticos, es decir, contribuyen a la deshidratación en especial cuando se toma poco líquido", explica la nutricionista Dyana Sepúlveda Caro, académica de Nutrición y Dietética de la Universidad San Sebastián

A la vez, aconseja disminuir el consumo de alimentos con exceso de grasas, sal y azúcar

En cuanto a la cantidad, dice que no es necesario reducir la ingesta de energía. Ella aclara que, como consecuencia de los cambios fisiológicos, se corre el riesgo de desnutrición a esta edad debido a las alteraciones gastrointestinales, alteraciones de la percepción del gusto, efectos socioeconómicos (ignorancia, pobreza, soledad, impedimentos físicos o alteraciones mentales), interacción con medicamentos, disminución de fuerza y coordinación muscular, entre otras.

En el caso de que el adulto mayor presente alteraciones dentales, la recomendación es que coma la carne molida, y las verduras y frutas ralladas o bien cocidas. Si opta por cocerlas, lo ideal es que sea al vapor para disminuir la pérdida de nutrientes.

LÁCTEOS

La nutricionista comenta que en el caso de los lácteos, "se recomiendan para todas las etapas de la vida, porque contienen proteínas para reparar y renovar los tejidos y calcio esencial para mantener los huesos sanos y prevenir la osteoporosis".

La advertencia que hace, es si es que el paciente presenta alguna alteración del tubo digestivo como intolerancia a la lactosa, se recomienda consumir leche sin lactosa.

Lo ideal es que consideren tres veces al día productos como leche, yogur, quesillo o queso fresco, de preferencia semidescremados o descremados.

La experta también aconseja que los adultos mayores coman al menos dos platos de verduras y frutas de distintos colores al día; porotos, garbanzos, lentejas o arvejas al menos dos veces por semana, en reemplazo de la carne; pescado, mínimo dos veces por semana, cocido, al horno, al vapor o a la plancha; preferir los alimentos con menos contenido de grasas saturadas y colesterol y reducir el consumo de azúcar y sal. Tampoco hay que olvidarse del agua. Lo ideal es beber entre seis y ocho vasos al día.

PROHIBICIONES

Obesidad, desnutrición, diabetes mellitus, hipertensión, ateroesclerosis y problemas dentarios, entre otras, son algunas de las enfermedad que pueden padecer los adultos mayores, y que, de hecho, se vuelven comunes en ese rango etario. Perto que, también, obligan a hacer modificaciones a la dieta.

Asimismo, en esa etapa de la vida se debe limitar la ingesta de alcohol. "Disminuir su consumo a no más de una copa de vino tinto al día". Entre los motivos, la especialista indica: "El alcohol modifica el efecto de los medicamentos, aumenta el riesgo de accidentes, caídas, fracturas y eleva la presión sanguínea".

También advierte que deben evitar al máximo el consumo de mantequilla, mayonesa, paté y productos de pastelería con crema, pues aportan grasas saturadas y colesterol, además de calorías. "Déjelos sólo para ocasiones especiales, al igual que las frituras", recomienda la nutricionista.

Distinto es si se trata de ácidos grasos esenciales como omega 3 y 9. "El aceite contiene ácidos grasos esenciales para la salud, por lo que aconsejo que incluya una pequeña cantidad en su alimentación diaria. Use de preferencia aceites de canola o soya, que contienen grasas omega 3, oliva u otro aceite vegetal", puntualiza.

Así como en la población general, en el caso de los adultos mayores es fundamental llevar una dieta que esté de acuerdo a los requerimientos nutricionales. Esta afirmación podría sonar obvia, pero no siempre se tiene el cuidado debido a la hora de alimentarse.

En conclusión, es primordial que la alimentación diaria excluya los alimentos que, por razones de salud, están contraindicados.

-Aumentar el consumo de alimentos ricos en fibra, como legumbres, frutas o verduras crudas, pan y cereales integrales. La fibra de los alimentos ayuda a bajar el colesterol y mejora la digestión.

-Beber agua en los intervalos de las comidas, 6 a 8 vasos en el día.

-Lavar los alimentos que contienen mayor cantidad de sal como aceitunas.

-Comer lento y masticar bien.

-Reemplazar las carnes rojas por legumbres, carne vegetal, huevos, jurel, salmón en conserva.

-Consumir uno o dos huevos cada semana.

-Al comprar carne, escoger la que tiene menos grasa.

-Considerar cuatro comidas al día.

-No fumar.

-Mantener un peso normal (evitar el sobrepeso y la obesidad además de la desnutrición)

-Realizar actividad física regular y mantenida en el tiempo. Puede caminar, subir escaleras, arreglar el jardín, nadar o inscribirse en clases de baile o algún deporte de su agrado. Lo ideal es realizar 40 minutos o 1 hora diaria de algún ejercicio que no necesita ser vigoroso, pero sí mantenido en el tiempo.