Solo por concepto de electricidad, en el Mercado Provisorio del Gran Concepción se adeudan más de $30 millones. La cifra se abulta más si se considera la mora en agua potable y gastos comunes del recinto que abrió sus puertas en julio de 2016.
Este espacio recibió a los comerciantes que se vieron afectados por el incendio que destruyó al Mercado Central en abril de 2013.
Los montos, que por contrato eran responsabilidad de la empresa COV EIRL, administradora del recinto, hoy serán traspasados al municipio penquista, que asumirá el control de las operaciones del centro de abastos.
Esto será de manera provisorio mientras se hace una segunda licitación para conseguir un nuevo administrador. La primera se declaró desierta.
El alcalde penquista, Álvaro Ortiz, aseguró que respecto de las deudas que mantiene el recinto "tenemos que ver que si cómo podemos resolver esa situación, porque hay un tema legal también".
Consultado por si realizarán juicios de cobranza para aprovisionar las deudas de los locatarios, Ortiz dijo que "tengo que ver todo eso, porque no puedo mandar mensajes por los medios para ver cómo vamos a tener que subsanar algunas situaciones, porque también hay situaciones internas que son súper complejas. Tengo que ponerme hasta en el escenario de los que sí pagaron".
En relación a cómo funcionará ahora el centro de abastos, el jefe comunal indicó que "vamos a tener que ver a dos o tres personas que estén 100% dedicadas a eso. En el tema de las deudas, eso en todos lados se paga".
Cuando comenzó a funcionar el recinto provisorio tenía 164 locales. Actualmente hay 142 de ellos con contrato vigente.
EXTENSIÓN
DEL COMODATO
A fines de agosto, y tras al menos dos rechazos, el director del Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu), Juan Pablo González, acogió la solicitud del municipio para extender el comodato del recinto ubicado en O'Higgins 50. El nuevo contrato entrará en vigencia hoy y se extenderá por seis años.
"Hicimos calzar la fecha de término con el permiso de ocupación provisoria que tiene la edificación que está ahí, que vence en 2025. La idea es autoexigirnos a tener una solución definitiva para la recuperación definitiva del mercado y que la solución provisoria, después de que pasen los años, no se transforme en la definitiva", precisó.
Es por estos dos acontecimientos -la extensión del comodato y el municipio como administrador hasta fin de año- que los locatarios han bautizado a este proceso como "la segunda era" del centro de abastos. En este proceso, según han manifestado, lo que más les preocupa es que los cobros que se apliquen no sean excesivos.
DIRECTORIO
Junto con el anuncio de extensión del comodato en agosto, las autoridades también comunicaron la creación de un directorio que ayudará a administrar el centro de abastos. Este directorio estará encabezado por el ministerio de Vivienda y Urbanismo y se conformará una vez que se protocolice el nuevo contrato de comodato, que el viernes fue firmado por el Serviu.
González dijo que los otros actores que participarán en el directorio son el Serviu y el municipio. Por ahora, añadió, no está considerado que participe un representante de los locatarios.
Respecto a esto, el alcalde Ortiz dijo que el mercado "es un tema de ciudad, no de los trabajadores por un lado y el municipio por otro. Por ejemplo, el terreno es del Serviu, por lo tanto ellos tienen algo que opinar; los recursos con los que se construyó el Mercado Provisorio fueron del Gobierno Regional, por lo tanto ellos también tienen que estar representados. Vamos a tratar de que estén representados todo los que tienen que ver con esto, donde también deberían estar los locatarios, porque desde afuera es súper fácil decir cómo se tienen que hacer las cosas".
Nieves Cares, representante de los locatarios y quien ha trabajado junto al Serviu para extender el comodato del recinto, dijo que esperan ser incluidos en el directorio "porque tiene que haber un representante de los beneficiarios y ese fue el compromiso que el Serviu adquirió con las personas".
En esta instancia, añadió, esperan poder modificar el reglamento interno, el modelo de negocios y que se revise el cobro de los gastos comunes.
Entre los compromisos que asumió el municipio durante la negociación de agosto, además de buscar cómo subsanas las deudas, también deberá realizar una modificación al reglamento que flexibilice el arriendo para actividades afines al mercado y, una vez que caduque el comodato, deberá también coordinar la relocalización de los locatarios.