Merkel pide cohesión y defiende el centrismo en adiós como líder de CDU
La Canciller alemana, Angela Merkel, llamó ayer a la cohesión en sus filas y defendió la vía centrista para su partido, en su último discurso como líder de la Unión Cristianodemócrata (CDU), ante el congreso que luego eligió a Annegret Kramp-Karrenbauer como su sucesora.
"Hace 18 años, en mi primer discurso como presidenta, pedí ir al grano ante una situación muy difícil para el partido", afirmó, al abrir su intervención, en alusión al escándalo de financiación irregular que se reveló entonces en la CDU, bajo la denominada "era" Helmut Kohl y al pasar el partido a la oposición.
Costó "superar" esa situación, prosiguió, y muchos años "y muchas elecciones después" el desafío ahora es "mantenerse unidos" y "liderar unidos", siempre desde la vocación centrista que caracteriza a la CDU.
Son momentos de fuerte "polarización social", agravados por la irrupción de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) en el panorama parlamentario alemán, recordó Merkel, para luego destacar la necesidad de desmarcarse de estas vías.
"Nosotros no incitamos al odio ni aislamos a nadie", "no discriminamos a nadie", "no hacemos diferencias entre el respeto a la dignidad humana", proclamó, para insistir en que desde la CDU "nos desmarcamos de quienes lo hacen" y "representamos los valores democráticos".
Tras el discurso de la Canciller, los 1.001 representantes de la CDU que llegaron a Hamburgo eligieron como la nueva timonel a Annegret Kramp-Karrenbauer, quien superó en la votación al ex rival interno de Merkel, Friedrich Merz y al ministro de Sanidad, Jens Spahn, ambos del ala derechista del partido.