Avanzar en equidad de género, en cuanto a representación política, acceso al mercado laboral e igualdad de ingresos, definir estrategias específicas para abordar las carencias sociales presentes en el territorio, acercar planes para mejorar la percepción social, establecer mediciones regionales en materia ambiental y fijar tácticas para enfrentar el riesgo de incendios forestales son algunos de los desafíos que tiene la Región del Biobío dentro de lo que es la Agenda 2030 de Objetivos de Desarrollo Sostenible del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud).
Alberto Parra, jefe del programa Resiliencia y Desarrollo Territorial del Pnud, estuvo ayer en Concepción para explicar cómo va la zona en este contexto y para tomar parte del III Encuentro de Responsabilidad Social, organizado por la mesa de Responsabilidad Social de Cidere Biobío.
En conversación con este medio, el ejecutivo comentó que existe una agenda global de desarrollo suscrita por 193 países y de hecho este es el acuerdo internacional más masivo que se ha rubricado de una solo vez y por consenso.
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La particularidad de esto, dijo, es que existen 17 objetivos muy específicos y compartidos por la comunidad internacional, que van desde hambre cero hasta igualdad de genero, ciudades resilientes a nutrición infantil, temas ambientales y económicos, entre ellos. "Es decir, pasa por todos los ámbitos y Chile, que fue firmante de este acuerdo en el 2015, tiene una meta al 2030. Por eso la pregunta es cómo va estar nuestro país en ese año, qué nivel de cumplimiento se alcanzará de esas metas, porque en la medida que avancemos en ellas teóricamente vamos a tener una mejor nación, con menos pobreza y más equidad", planteó.
Aclaró que hay muchos avances, pero es necesario que entender que un objetivo por sí mismo no va a lograr el desarrollo, porque este requiere de la articulación y la interdependencia. Ahora, remarcó que ningún país del mundo tiene la agenda cumplida en un 100% y el valor está en que si hay un acuerdo en que existen 17 cosas en las que se debe avanzar, se puede hacer de manera estructurada.
Sobre el Biobío, Parra dijo que hay datos trascendentes y esta Región tiene muchas fortalezas y desafíos, con indicadores que van variando. Por ejemplo cuenta con US$ $10.222 PIB regional per cápita (Banco Central 2016), el 21,6 % del PIB Regional proviene de la industria manufacturera, el 19,2% de las personas vive en contexto de pobreza multidimensional, respecto al 20,9% nacional de acuerdo a la Casen 2015.
Además, el experto del Pnud afirmó que hay desafíos muy importantes en esta zona que son muy relevantes, vinculados con la equidad de género, como por ejemplo que hay un 34,5% de diferencia en la participación en el mercado laboral entre hombres y mujeres y el 34,8% es la desigualdad en el ingreso autónomo entre un hogar con jefatura femenina y uno con jefatura masculina, a lo que se suma que el 14,3% de los cargos de elección popular son ocupados por mujeres, una cifra bajo el promedio nacional que es de 22,3%.
Por ende, dijo que hay un desafío importante en estos campos, a lo que se suma una lamentable coyuntura sobre el tema de la paz y conflictividad social en varios puntos. "Por eso lo interesante que es la Agenda 2030, porque da una vuelta por varios objetivos y un conjunto de indicadores que no son solo el empleo, porque hay temas medioambientales y de productividad.
"Desde ese punto de vista, la agenda establece desafíos y que son colectivos para la Región, que no solo son para el sector público, privado y de la sociedad civil. Por eso es que todo tipo de encuentros son importantes", acotó.
Aparte, como tiene un horizonte a doce años más, se puede seguir avanzando y sobre todo desde las regiones, pues a nivel nacional Chile ha hecho varios esfuerzos, con la puesta en marcha de la agenda 2030 que es dirigida por la Cancillería, los ministerios de Economía, Medio Ambiente y Desarrollo Social, es decir, cuenta con todo una labor nacional que es muy interesante. ¿Dónde se está flaqueando?, Parra estima que en plano regional y por eso piensa que es clave entender que el desarrollo se produce en los territorios y si se falla en eso, en la vida cotidiana de las personas no se avanza.
APURAR EL TRANCO
Mauricio Franjola, presidente de la mesa de Responsabilidad Social de Cidere Biobío y representante de la Universidad Santo Tomás, estimó que Chile está al debe en el cumplimiento de los objetivos, pero con estas acciones de encuentro pretenden apurar el tranco.
"Como gremio decidimos generar estas alianzas estratégicas que corresponden al objetivo 17, que hemos llevado adelante, pero declarada y con objetivos concreto. En sentido, con la equidad de género y el posicionamiento no solo en el mercado laboral sino que también en todas las dimensiones de la sociedad, es tremendamente relevante. Llevamos dos años trabajando en el tema y hemos avanzado bastante, porque hemos instalado el tema no solo en los asociados, sino también en los invitados con los que hemos ido promoviendo estas metas", apuntó.
Por eso cree que si deja bien armadas las alianzas, tendrán hechos concretos con los que podrán mejorar los indicadores sobre lo que está ocurriendo en la Región, pues hay temas medioambientales, económicos y sociales y dentro de ello está el de equidad de género y de igualdad laboral para las mujeres.