Claudia Sierralta se despide de Concepción con "Por viaje vendo"
Luego de 18 años, Claudia Sierralta se despide de Concepción. La artista no quiso emprender su vuelo definitivo a Santiago, sin antes agradecerle a la ciudad penquista por acoger fraternalmente gran parte de su propuesta artística.
Mediante su exposición "Por viaje vendo", la pintora realiza una retrospectiva de toda su creación, desarrollada durante estas casi dos décadas en la capital regional.
La muestra, que estará disponible al público hasta el próximo 13 de julio en Galería Marina, considera 83 piezas. "Es una recopilación de 8 series diferentes. Son obras nuevas, rehechas y de colecciones particulares. También incluye una selección de grabados intervenidos por mí", cuenta Sierralta.
En relación al montaje, está diseñado como una línea de tiempo. "Cada serie empieza con la primera pieza que realicé en el 2000 y termina con la última de 2018. Además, contempla una instalación de mi taller puesta en una esquina de la Galería", comenta la artista.
El mensaje que se busca comunicar tiene que ver con las emociones. "Hoy quiero regalarle a Concepción una parte de mí. Mi paleta, mi pincel y mi sudor. La humilde reflexión de mi dibujo y la incesante búsqueda inacabada de la sensación que acompaña la emoción, la fuerza y la temperatura de mi color. Es una manera de hacerle un tributo , para agradecer", indica.
CIERRE DE UN CICLO
Claudia siente que ya cerró un ciclo con Concepción y debe emprender nuevos desafíos. "Yo venía por cinco años. Me querían trasladar a Santiago, pero yo no me quise ir, porque me enamoré de esta ciudad y su bondad natural. Ahora quiero volver a mis orígenes, puesto que laboralmente me conviene. Yo piso esa ciudad y vendo todo", comenta.
Sin embargo, con ella se van todas sus vivencias, puesto que están muy arraigadas en su corazón. "La travesía en esta tierra querida ha sido, sin duda, un luminoso y prolongado momento suspendido en mi vida, una colorida fijación de un tiempo detenido, un segmento feliz en la línea de los acontecimientos y un regalo en mi horizonte", dice.
Uno de los paisajes naturales que más extrañará, indudablemente es el Río Biobío, que ha sido un gran motivo de inspiración de sus obras. "La contemplación cristalina de los más diversos afluentes de aguas corriendo ante mis ojos y las orillas del Rio Biobío, porque me conecta con mis emociones", apunta.
Finalmente, Sierralta define a Concepción como "Tierra mojada por sus aguas, que acarician y emulsionan soledades. Cielos prístinos, esperanzas cargadas de árboles y grises cambiantes, por sus vientos sorpresivos como impulso, latiendo fuertemente en mi quehacer de artista".
Luego de esto, Claudia confiesa irse a Santiago mucho más tranquila para adentrarse y sumar nuevos proyectos y creaciones artísticas.