El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, afirmó ayer que sería "trágico" perder la oportunidad de celebrar una cumbre entre Estados Unidos y Corea del Norte y dijo que las negociaciones van en la "dirección correcta".
Pompeo hizo estas declaraciones tras reunirse ayer y el miércoles en Nueva York con el dirigente norcoreano Kim Yong-chol, considerado al segundo al mando en Pyongyang, con el objetivo de alcanzar las condiciones mínimas para la cumbre, prevista para el 12 de junio en Singapur.
El alto funcionario estadounidense confirmó que Kim, vicepresidente del Comité Central del Partido de los Trabajadores norcoreano, se desplazará a Washington para llevar al Presidente Donald Trump una carta personal del líder norcoreano, Kim Jong-un.
"Estoy confiado en que nos estamos moviendo en la dirección correcta", aseguró Pompeo sobre la cumbre que había sido cancelada por Trump, pero que ahora parece estar concretándose, agregando que esta supone una oportunidad "única" para lograr una era de "paz, prosperidad y seguridad".
lavrov en pyongyang
Kim Jong-un recibió ayer en Pyongyang al ministro de Exteriores de Moscú, Serguéi Lavrov, quien lo invitó a visitar Rusia para reunirse con el Presidente ruso, Vladimir Putin.
En la cita entre ambos, Kim elogió al líder del Kremlin, asegurando que "valoro altamente que el Presidente Putin contrarreste la hegemonía de EE.UU.. Ustedes actúan con decisión y nosotros estamos siempre listos para intercambiar opiniones con Moscú respecto a la situación en la península coreana".
Continuando con la diplomacia norcoreana, hoy volverán las reuniones de alto nivel entre el régimen y Seúl. El encuentro se desarrollará en la militarizada frontera intercoreana y se centrará en empezar a implementar lo acordado por los dos países en su declaración conjunta del pasado 27 de abril, en la que acordaron trabajar para lograr la paz y la "total desnuclearización" de la península.