Alan Robinson dibujó cómic que tendrá su serie en Netflix
Alan Robinson cuenta que Netflix lo "acompaña" en su jornada laboral, la que desarrolla diariamente, durante 8 a 10 horas, en la oficina que este chillanejo de cuna de 39 años tiene en San Pedro de la Paz. Allí vive desde el 2015, año en que instala su residencia en el Gran Concepción, junto a su mujer e hija.
Y aunque reconoce que no siempre presta toda la atención a las series de su interés, pues "las veo mientras trabajo", el ilustrador se muestra ansioso de ver ya el resultado con personajes reales de lo que será la serie "V Wars" que actualmente trabaja la señal streaming, en una primera temporada de 10 capítulos (aún no tiene fecha de estreno).
La verdad, Robinson tiene razones de sobra para, en este caso, dejar los lápices y tintas, para darle plena atención a la producción, que protagonizará el actor norteamericano Ian Somerhalder ("Lost" y "The vampire diaries").
De los 12 números del cómics aparecidos en 2014, basados en la novela de Jonathan Maberry (2012), un total de 9 fueron ilustrados por el artista local en su calidad de oficial (el italiano Marco Turini fue invitado para realizar un arco de 3 números).
"En todo caso, con Maberry fue un trabajo en equipo, por lo que constantemente interactuamos, y él tampoco supervisaba desde lo alto, sino que yo podía aportar con ideas", cuenta Robinson, quien el martes supo del paso que tendría la historia dibujada por él a la señal de Netflix.
De hecho reconoce que como actualmente mucha de su labor puede hacerse por internet, recién en julio del año pasado, en la ComiCon de San Diego, conoció a Maberry. "Ahí me contó que existían conversaciones para hacer una serie, pero nada más", recuerda el dibujante.
VAMPIROS Y POLÍTICA
Con fundamento en los vampiros, "V Wars" se centra en Luther Swann, el que interpretará Somelhalder, un consejero sobre vampiros, que comienza a trabajar para el gobierno, una vez que su familia resulta exterminada.
"Psicológicamente queda muy mal, ya que su hija se come a su madre y hermano. Luego es contratado para que supervice el medio con los vampiros", cuenta Robinson sobre la trama de un relato que rescata no sólo por el sentido de la acción en una aventura de esta naturaleza. "Hay complot, mucha política y temas como el racismo. En el fondo, es una serie que refleja como somos las personas, y muestra cosas diferentes a las que se pudiera pensar", agrega.
- Súper buena. Representa lo que traté de lograr con el personaje, de como se iba a ver en el cómics (le dio forma y contexto en dos semanas antes de llevarlo a las viñetas).
- Claro, algo muy presente en la sociedad actual. Esta serie de cómics siempre me gustó mucho, porque el personaje no es pura acción, también conversa mucho.
- Quiero ver cómo van a solucionar algunas cosas y si se parece al cómics, que también tiene cosas de la novela, ya que hablamos de un mismo universo, donde está todo relacionado (en las revistas mensuales de 20 páginas Robinson se dibujó como un cameo con su familia).
- Puede ser, no me cierro para nada, y si me invitan por más números estaría encantado.
Incluso, Robinson cree que puede ser posible publicar la serie original editada por IDW en Chile. Esta casa ya trajo a nuestro país "Locke and Key" (dibujos de Gabriel Rodríguez) y "Little Nemo", con el mismo ilustrador, hace un par de años.
"Hasta sería bueno publicarla, sobre todo, por el tema de la tolerancia, que está tan vigente", reitera, quien pronto anuncia novedades desde Estados Unidos.
"Estoy en un proyecto con otra editorial, de la que ahora no puedo adelantar nada", explica, quien también encabeza Estudio Austral, proyecto editorial junto a Patricio Ibarra, fundado el año pasado.
A través de éste la idea es rescatar y publicar ilustradores del sur de Chile con proyección en el país y extranjero.