Estiman que 57 mil familias recibirán agua por problemas de escasez hídrica
Pese a que las precipitaciones este 2017 han sido las más importantes de los últimos años en la zona, tal situación no llevó a que se lograra un superávit hídrico en las regiones del Biobío y de Ñuble, por lo que nuevamente, como ha sido desde el año 2013, se deberá suministrar agua potable a más de 50 mil familias de 45 comunas que tienen problemas para abastecer el consumo humano.
El informe emitido por la Dirección General de Aguas (DGA), y que permite a las autoridades tomar decisiones en esta materia, sostiene que pese a los más de 1.095 milímetros de agua caída hasta noviembre pasado, el déficit en el territorio que abarca las dos regiones es de 3.3% en comparación a un año normal. Una situación similar a lo que ocurre con los caudales de los principales ríos de la zona, los que también presentan un 15,8% de déficit.
Por ello, una de las primeras decisiones sería la de prorrogar el contrato de entrega de agua a comunas que tienen escasez hídrica. "Va a haber una prorroga de los contratos de abastecimiento (...), pero eso lo vamos hacer por el periodo que nos queda de Gobierno, porque las nuevas autoridades deben evaluar como se seguirá desarrollando", contó el intendente del Biobío, Rodrigo Díaz.
ENTREGA DE AGUA
Desde 2013 y debido a la escasez de lluvia, el Estado definió la entrega de agua potable para consumo humano en sectores rurales de más de 30 comunas. Hoy, a 5 años del inicio de ese programa, la ayuda a través de camiones aljibes llega a 45 municipios.
La directora regional de la Onemi, Gilda Grandón, contó que proyectan que para el verano de 2018, el peak de familias que recibirán el beneficio llegará a 57 mil, cifra similar al máximo que se entregó en 2017 en la zona.
"Son 21 comunas de la Región de Ñuble, 13 de la Provincia de Biobío (sólo Alto Biobío no tiene problemas), 5 son de Arauco y 6 de la Provincia de Concepción", precisó Grandón.
La autoridad regional de la Onemi contó que si bien esa es la cifra estimada para la temporada estival, aclaró que por estos días se encuentran en proceso de actualización de los datos para definir si esa cifra aumentará o se reducirá. "Lo que hacemos con las municipalidades es que cada tres meses actualizan la información. Ellos pueden enviarnos antecedentes para agregar o quitar familias en cada momento", expuso Grandón.
El director regional de la Dirección General de Aguas (DGA), César Saavedra, contó que con la información que tienen sobre la situación de caudales y precipitaciones proyectan que las comunas que han requerido agua este año seguirán necesitando. Aclaró que es la Onemi, con la información que entregan ellos y la Dirección Obras Hidraúlicas, la que define comunas y puntos que necesitan el elemento vital, pero declaró que con los antecedentes que tienen hay zonas que están más complejas que otras.
"El secano costero siempre es la zona de la Región que tiene mayor complejidad de sequía. Son comunas de Ñuble y de Arauco en particular, que por la características hidrogeológicas del sector no tienen la misma producción de agua", explicó Saavedra.
INVERSIÓN
En 2013 la inversión realizada para entregar agua a las zonas llegó a $3.533 millones, pero en 2016 dicha la cifra superó los $7 mil millones, principalmente porque el déficit hídrico en la zona se hizo más complejo.
La directora regional de Onemi declaró que actualmente los contratos que se realizan para la distribución no es por número de camiones, sino que por el servicio de entrega de agua potable.
"Se paga por litro de agua y para tener una mayor regulación del servicio que realmente estamos contratando. No estamos cancelando transporte, sino para que las personas tengan agua potable en sus viviendas", contó Gilda Grandón.
Actualmente, la entrega de agua que se realiza en sectores rurales de las 45 comunas llega a 50 litros por persona de forma diario, la que se entrega dos veces por semana. "Se realiza de esta forma para que el agua esté más fresca", contó la directora regional de la Onemi.