A las vitrinas de los mercados de lujo aspiran llegar jóvenes emprendedores
Grandes son los talentos jóvenes de la zona y aunque unos son más visibles que otros todos tienen en común el deseo de llegar lejos. Es el caso de los hermanos José y Natalia Chandía Herrera, quienes esperan ver sus bolsos, carteras y accesorios en las vitrinas de la alta moda de Europa y Estados Unidos, en Asia o el Medio Oriente, compitiendo con unos Louis Vuitton o cualquier otra marca del mercado del lujo. ¿Y por qué no? El conocimiento, las herramientas y las materias primas las tienen, y la experiencia la van adquiriendo a diario.
Él es diseñador de Ambientes y Objetos de la UDD y su hermana, artista plástica (grabadora) de la UdeC y diseñadora gráfica del Duoc UC.
se abre
un mundo
Llegar en 2014 a Europa, específicamente a Italia cuna del arte, las artesanías y el diseño para hacer una pasantía durante 3 intensos meses fue abrirle los ojos a un mundo de posibilidades. Allí se abocó al diseño de lujo enfocado a muebles, pero centrado en la tapicería, lo que finalmente le permitió desembocar en el trabajo que desarrollan ambos hoy, diseñando y fabricando estos artículos con materias primas de alta calidad exclusivas de la zona como los textiles de la fábrica Crossville de Tomé, de la estadounidense Holland & Sherry, y cueros nacionales en un pequeño taller en Chiguayante, en la casa de sus padres.
En febrero partirán a Europa por un tiempo para empaparse de nuevos aprendizajes y buscar proveedores de algunos materiales como los herrajes españoles, de calidad más reconocida. Natalia tomará un curso de perfeccionamiento en diseño de carteras en Florencia.
"Esto muy importante para nosotros que estamos muy conscientes de los procesos que implica un trabajo hecho a mano. Es muy relevante y es lo que queremos impregnar en cada uno de nuestros productos".
La idea también es replicar este conocimiento en Concepción. "Creemos que hay mucho talento y esa es nuestra motivación y la razón de por qué estamos acá y no nos fuimos a Santiago o a otro lugar".
La mira entonces no solo apunta a "fabricar" un producto, sino en que ese producto tenga un relato, que cuente una historia, que tenga un significado que pueda compartirse, y eso le agrega otro valor, que permite acceder a mercados de nicho donde estas cosas se aprecian.
Y aunque esta conciencia es todavía incipiente en nuestro país, no lo es en mercados desarrollados. Es, también la plataforma en la que confían los catapulte a esas vitrinas internacionales donde de un modo indirecto, esperan estar a través de las materias primas que usan como son los algodones americanos, las gabardinas de algodón, linos y lanas de Crossville, fábrica que cuenta con una tienda en Saville Row, la avenida londinense donde están las más famosas sastrerías del mundo.
Aprovechar esos "links" es una posibilidad para aceder a un nicho en los mercados desarrollados.
Todo tiene una historia porque el consumidor se hace cargo de un producto que tiene un contenido. No es lo mismo comprar un anillo en Aliexpress que comprar algo que está hecho a mano, con mano de obra local y con materiales nobles, comenta José.
"Cuando empezamos a "comoditizar" todo, no hay creatividad, no hay desarrollo de la economía no hay una declaración detrás". La decisión de compra, sostiene José, es votar por un proceso.
A modo de reflexión, el también docente en la UDD, comenta que es muy necesario potenciar el desarrollo de empresas creativas en la Región. "Hay gente muy talentosa en todas partes, hay mano de obra muy calificada que fue quedando tras la extinción de las históricas industrias manufactureras de la Región como Calzados Gacel y Caprice, la industria textilera de Tomé o de la cerámica de Penco. En Europa estas personas son los grandes maestros, los artesanos más refinados y expertos del mundo". Además, es un estímulo para la economía local, al introducir competencia con productos de calidad superior a los del retail.
Hasta aquí todo se ha hecho con recursos propios invirtiendo unos $3,5 millones.
Su hermana es la principal operadora del taller y hace unos días contrataron a una joven costurera que hacía arreglos menores en su casa y a quien calificaron de extraordinaria.
A fines del próximo año prevén iniciar exportaciones. "Hay muchos mercados a los que podemos ir en Asia o Australia".
carga religiosa
La carga religiosa principalmente católica impuesta en la conquista española que llevamos en toda Latinoamérica, así como la arquitectura y la idiosincrasia, inspiraron el nombre de la marca. Santísima Handmade Bags.
En la tienda, ubicada en la Galería San Nicolás, local 15 de Concepción se pueden encontrar, bolsos, carteras y accesorios desde los $4 mil a los $59.900.