Moderado optimismo y cautela mantiene el empresariado regional
Una tendencia que si bien no alcanza para ser optimistas del todo respecto de las proyecciones tanto de la Región como del país hacia los próximos seis meses, y que muestra que no variará significativamente,
La percepción de las empresas de la Región del Biobío sigue anclada en el terreno de la cautela, desde el punto de vista de efectos políticos en el quehacer del sector privado, así como en el ámbito de la actividad económica, según arrojó el XII Estudio de Percepción Empresarial, que elabora Irade.
Esta situación en parte se explica por la aparición de elementos de la economía, tanto en aspectos de demanda interna como globalizada junto con aspectos políticos que mantienen la cautela sobre cómo entonces la economía podría retomar un crecimiento, dijo Lorenzo Chavalos, vicepresidente de Irade.
Esto queda de manifiesto en el Estudio, cuando los consultados proyectan la situación económica de su empresa para los próximos seis meses, donde un 25% opina que "mejorará", un 61% sostiene que "no variará", mientras que el 14% opina que "empeorará".
En relación al estudio anterior (noviembre 2016) vemos que ha habido un aumento en el número de empresas que admite estar pasando por un mal momento. "Es una cifra que hay que ponerle atención pero tampoco se trata de un porcentaje alarmante", afirma Chavalos.
En cuanto a la situación de la región el 6% la define de "buena", un 50% como "regular" y, un 28% de "mala".
¿Hacia dónde
va la economía?
Ante la consulta ¿hacia dónde evolucionarán las áreas de la economía?, surgen con fuerza los sectores Energía, Agroindustria y Tecnología que por primera vez se mide en forma separada, ya que antes se incluía en Servicios.
Al respecto Francisco Migueles, gerente general de Irade, destaca que los sectores mencionados, junto a Servicios y Turismo se proyectan como las actividades que "esperamos muevan las agujas en los próximos meses".
Detalla que la inclusión de la variable tecnología tiene que ver con que dentro del ecosistema de innovación y competitividad hay un fuerte impulso a los desarrollos tecnológicos. "Hay varios desarrollos muy interesantes, algunos que incluso han escalado a nivel mundial, viene el parque científico tecnológico. Hay diversas fuerzas económicas que están empujando en esa dirección y nos parece súper relevante también poderlo medir".
Contingencia
política
En esta medición y por segundo año consecutivo, se incluyeron preguntas relacionadas con la gestión del intendente del Biobío, Rodrigo Díaz y de su gabinete económico.
De acuerdo al estudio la aprobación de la primera autoridad regional aumentó 6 puntos, pasando de los 62% de noviembre de 2016 al 68% en abril de 2017.
"Con esto el intendente sostiene su liderazgo político. Las obras que se van concretando reflejan esta valoración. Además, acá vemos mucha voluntad deincluir al sector privado en el quehacer regional, como con su liderazgo incluso durante la emergencia de los incendios del verano", consignó el ejecutivo.
Aquí claramente el intendente marca una tendencia que ha tenido en el pasado y escala sobre el 68% comparado con el 2016, y eso con más de 80 empresas, empresarios y ejecutivos de las más importantes empresas de la región es un reconocimiento al trabajo que ha hecho acá sin lugar a dudas, agregó Francisco Miguieles.
En el caso de los seremis los que se mantienen con mayor nivel de conocimiento son Iván Valenzuela de Economía (65%) Carola Venegas de Energía (62%), René Carvajal de Obras Públicas (61%) y Richard Vargas de Medio Ambiente (52%), mientras que los seremis de Trabajo, Transportes, Agricultura y Minería, tienen menos un 30% de nivel de conocimiento.
Respecto de la evaluación de los mismos nuevamente la seremi Carola Venegas es quien obtiene una mejor valoración de su gestión con un 84% de aprobación, seguida de Iván Valenzuela, quien obtuvo un 60%.
"Llama la atención nuevamente el bajo nivel de conocimiento que tienen las empresas respecto de algunos seremis. Independiente de las razones vemos que hay un déficit de comunicación y de vinculación del gabinete económico con ámbito empresarial que habría que mejorar", concluye Lorenzo Chavalos.