Essbío concentra inversiones en calidad y capacidad de servicio
Pese a que este año, en comparación al 2016, hay una reducción en el presupuesto de inversiones, Essbío se centrará en asegurar la calidad del producto durante todas las etapas productivas y aumentar la capacidad de la infraestructura para satisfacer incrementos en la demanda, además de importantes gastos para el recambio de las tuberías de agua potable y servidas.
Así lo adelantó a este medio Peter Schmohl, gerente regional de la sanitaria, quien destacó que para 2017, el plan de inversiones contempla $23.400 millones, $600 millones menos que en el ejercicio anterior.
El ejecutivo sostuvo que los focos estarán en las plantas de producción y tratamiento debido al alto requerimiento, a lo que se suma la calidad del servicio, vinculado al proceso a la distribución del agua y recolección de aguas servidas.
TRES FASES
Explicó que el monto se distribuye en tres ítem. El primero es un gasto de alrededor de $10.000 millones solo en concepto de calidad de servicio, en que destaca la renovación de 32 kilómetros de redes de agua potable y servidas. "Como Región contamos con un proceso en el que vamos definiendo las variables que involucramos en esta fase de renovación. Es así que estamos abordando desde pequeñas localidades, que tiene entre 500 y 1.000 clientes, hasta de mayor tamaño como el Gran Concepción", aclaró.
En todo caso, de acuerdo a ensayos han detectado puntos donde se requiere mejorar presiones, mejorar la infraestructura para evitar rebases de aguas servidas y acrecentar el servicio en época de mayor demanda, lo que se da en grandes lugares. Por ende, los montos mayores se lo llevan las grandes ciudades, como Concepción, Talcahuano, Chillán y Los Ángeles.
Aclaró que tanto en urbes grandes como chicas el consumo por clientes es similar, pero hay lugares menores que tienen estacionalidades súper importantes. Por eso, agregó, el énfasis en la inversión para satisfacer la demanda y el crecimiento también tendrá un importante aporte en plantas en Florida, Quillón, Hualqui, que son localidades con fuerte presencia turística, sobre todo en verano.
También citó a Los Álamos, donde están ampliando la planta de tratamiento de aguas servidas, lo mismo están haciendo en Hualqui, que se suma a un gasto importante en Los Ángeles.
Peter Schmohl añadió que el segundo punto de la inversión es de $9.400 millones en capacidad, que se traduce en las plantas de producción de agua potable. "Este gasto se debe a un crecimiento histórico. Estas plantas no se amplían por litros, son tramos de aumento importantes, en que se preparan las plantas para 15 a 20 años, es decir, hay una proyección de largo plazo. Pero también está el incremento vegetativo, que es anual de un 2% como empresa y esa cifra se asume con la infraestructura actual, con mejoras a los sistemas productivos y cuando nos acercamos a la capacidad de la planta, en que debemos estar listos cuando ésta llegue a su capacidad máxima", apuntó.
En este plano, detalló que levantarán plantas de aguas servidas en las comunas de Los Álamos, San Carlos, Hualqui, Quillón, Los Ángeles y Quirihue. A estas se agregan para agua potable en Arauco, Florida, Hualqui y Coelemu. A lo anterior, se suman estanques para Coronel, Coihueco, Talcahuano, Chillán, Los Ángeles y Bulnes.
Y el tercer punto del gasto tiene como objetivo la mantención y el soporte, donde se destinarán $3.600 millones para la reposición y reacondicionamiento de equipos y el plan de generadores de respaldos por $1.260 millones.
El ejecutivo destacó que la infraestructura de Essbío está bajo tierra y el resto está concentrado en grandes plantas. A todo esto hay que anexar la continuidad y eso es clave, pues gran parte de la instalación sanitaria tiene que mover volúmenes de agua, lo que se hace con energía, ya que cuando hay caída de los sistemas eléctricos, el trabajo se hace complejo.
Es por ese motivo que están con un plan hasta el 2019 de incorporar generadores en todas las plantas de producción de agua potable, ya que en servidas existen. "Es un monto importante para dar mayor confiabilidad a los sistemas de producción contra eventos de corte de energía externos", subrayó.
Por otra parte, y dentro de lo que fue la rotura de una matriz el pasado 21 de febrero en la población Pedro del Río y que implicó el corte de suministro de agua para miles de personas, Schmohl sostuvo que han identificado sectores en que no van a esperar que ocurra un incidente como ese. Por eso, indicó, está la renovación de los 32 km de cañerías.
La decisión para eso es que se ha definido que hay 32 mil metros de agua potable y servida que van a cambiar porque está pronto a cumplir su vida útil o hay necesidad de renovar. Asimismo, aseguró que cuentan con planes que son inéditos en la industria sanitaria, que tiene que ver con el riesgo.
"Es una área que mide la afectación hacia la comunidad. Es así que al producirse una rotura en algún punto de las comunas que cubrimos, tenemos un programa que minimiza los impactos para así dar continuidad al suministro", aclaró.
Por otra lado, indicó que poseen un plan de riesgo de rotura en grandes conducciones, es decir, están generando toda una mirada global a las redes de agua potable, pues al conducir grandes niveles, podría afectar a clientes en la continuidad o un daño a la comunidad. "Hay una iniciativa preventiva en cuanto a diagnosticar e identificar donde están las brechas, para luego programar inversiones que puedan evitar el corte del servicio", hizo ver.