Hay expectativas, y altas. En este caso, de los propios artistas involucrados en la exposición "Mano alzada: espacio real, espacio imaginado". Ésta se inaugura mañana, a las 19 horas, en la Sala 3 de la Pinacoteca UdeC.
Dicen que también hay nerviosismo, explicado en la ansiedad de reencontrarse en el espacio y la casa de estudios que formó como artistas visuales a Pilar Hernández (1956), Germán Araos (1952) y Rodrigo Cociña (1956).
Aunque sólo este último tiene vínculos de raíz con la capital regional, los tres lograron una estrecha relación con Concepción, desde fines de los años 70.
Egresados de la Escuela de Artes de la casa del Campanil durante la década de los 80, también tienen en común haberse instalado en Santiago -Cociña en 1977, mientras que Hernández y Araos en 1983-, para continuar allá sus carreras. Ello, en diferentes expresiones, actualmente muy bien reconocidas en la plástica.
En particular, dicen, en esta muestra la unión está dada por el oficio. "El objetivo es unir miradas sobre la abstracción, la figura humana y el paisaje, viendo cómo se intercala respecto a la trayectoria individual", sostienen en relación a la iniciativa que estará abierta al público hasta el próximo 9 de abril.
En particular, Pilar Hernández realiza una mezcla entre pintura, dibujo y escultura, mientras que Rodrigo Cociña muestra trabajos distintos, a partir de una suma de materiales. Allí también exhibirá 20 videos (arte, poesía y registro de entrevistas).
Araos, por su parte, busca marcar una posición en el mundo, a partir del trabajo con diapositivas de carácter íntimo que "en realidad son pinturas", según dice. Contienen referencias al desborde, a los terremotos y la configuración del continente.
Sobre los motivos presentes en sus apuestas, Pilar apela a lo figurativo, Araos al paisaje e investigación sobre la materialidad; y Cociña cuestiona la pintura. "La utilización del blanco como el color que manda. En el caso de los videos son un conjunto de temas: poesía sonido y música", señala.
- No directamente, pero sí está presente en el imaginario de cada uno (...) Desde ese punto de vista es inspiración.
Sobre la idea de "Mano alzada" que sustenta el nombre de la exposición, comentan que se explica en que los tres (expositores) basan su experiencia en lo manual.
"El artista como creador de objetos, que egresan de la UdeC y que regresan a su ciudad natal", señalan. Hay que acotar, sin embargo, que Araos es nacido en Santiago y Hernández en Temuco.
- Hicimos una maqueta, en el caso de las esculturas, las ambientamos como conjunto de obra. Será un montaje libre y suelto, para que haya una lectura integral de la muestra y no segmentada. Es decir que todo converse con todo.
- Son obras que hablan desde la historia local, la representación subjetiva y el entorno biográfico, características que se reflejan en el montaje y, por lo tanto, en el espacio.
- Es trascendental para cada uno, porque es volver al origen. En el caso de Cociña, vivió en Concepción desde pequeño, por lo cual su imaginario se basa en esta ciudad. Germán, pese a ser de Santiago, sus estudios de arte los desarrolló en Concepción (...) Yo (Pilar) soy de Temuco, pero también estudié en esta Escuela, por lo que este regreso es un hito.
Señalan que pese al paso de los años y la distancia del tiempo, mantienen contacto con las artes visuales penquistas. "Bastante, especialmente Germán y Pilar, quienes aún se contactan con sus ex compañeros de Arte", apunta Cociña. Cuenta que él, incluso, mantiene contactos más transversales, no sólo con las artes visuales, sino "con el arte en general".
- Creemos que es muy importante, aunque (consideran) es muy cerrada, sin integrarse al resto del país.
Finalmente, comentaron que para montar la presente exhibición vienen trabajando hace dos años. Producto de ello es que Pilar trae 16 obras, Rodrigo 17 y Germán 30.