Durante los primeros días de 2017, en dos de los 22 incendios forestales ocurridos en la Región hubo peligro para las viviendas. El riesgo de que ocurra una situación como esa, similar a lo que se vive en Valparaíso, se debe a que las edificaciones se encuentran en las zonas denominadas de interfaz, es decir, con casas cercanas al sector urbano pero rodeadas de bosque.
A raíz del riesgo que genera este tipo de zonas, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) levantó a mediados de 2015 un catastro en 24 comunas, donde identificó 148 puntos críticos de ocurrencia de incendios forestales, y en donde pueden verse afectadas personas o viviendas.
De estos, 57 son considerados prioritarios debido a que existe un mayor acontecimiento de siniestros (ver infografía). La Provincia de Concepción concentra el 40% de los sectores categorizados en zona roja. Es en estos puntos donde la Conaf trabaja de manera preventiva para reducir el riesgo de incendios.
En la presente temporada, la Región suma 249 incendios, un 29% más que en el período anterior. Además, a la fecha ya se han consumido 880 hectáreas, un 30% más que la temporada pasada. Desde Conaf aclararon que esta cifras son menores a las del último quinquenio (promedio de las últimas cinco temporadas), que se toma como base para ver si hay un alza o baja en los siniestros y afectación de superficie.
TRABAJO PREVENTIVO
El director (I) de Conaf, Alberto Bordeu, sostuvo que para hacer un análisis objetivo de si el plan de prevención de incendios forestales en zonas de interfaz de la Región ha resultado positivo, deben pasar mínimo cinco años.
No obstante, comentó que las acciones realizadas irían por un buen camino.
A modo de ejemplo nombró el trabajo que la Brigada de Prevención de Incendios Forestales de la institución ha hecho en el sector El Santo, comuna de Tomé. Este es uno de los 57 puntos críticos identificados para hacer prevención. Bordeu declaró que en esa zona, donde a la fecha no se han originado incendios, se detectó que los siniestros eran provocados por menores de edad.
"Llevamos un año y medio trabajando con actividades lúdicas con los niños y la ocurrencia de incendios forestales se ha reducido (…). El hecho de identificar dónde y por qué ocurren los incendios nos permite ir a los sectores y llegar con soluciones mucho más precisas y efectivas del problema", contó Bordeu.
En la Provincia de Concepción, de los 61 siniestros ocurridos a la fecha, sólo cuatro se han dado en zonas consideradas como primera prioridad a intervenir en prevención.
Uno los puntos complejos, y que la Conaf considera símil a Valparaíso, es en el sector de la Agüita de la Perdiz, en Concepción.
"Es una población que está creciendo al sector rural y boscoso, como es el Cerro Caracol. La diferencia es que tenemos menor cantidad de viviendas informales, ni tampoco la costumbre de como existe en Valparaíso, de utilizar las quebradas como basurero", precisó el director (I) de Conaf.
En ese punto el municipio penquista, al igual que en otros puntos identificados como zonas rojas, realiza desde octubre un trabajo preventivo.
"En el Cerro Caracol (otro punto prioritario) en la temporada 2014-2015 hubo 37 focos de incendios. En la temporada anterior no hubo, y esperamos que esa situación se repita en este periodo", contó el coordinador del comité comunal de emergencias y director de Aseo y Ornato de la Municipalidad de Concepción, Jorge Silva.
Precisó que una de las acciones que ha permitido la reducción de siniestros es que hay una empresa que hace mantención al Parque Metropolitano y porque hay guardias.
"Se ha controlado la gente que ingresa y se detecta de forma rápida si hay un punto en donde hay un incendio", sostuvo Silva.
En San Pedro de la Paz, la Dirección de Medio Ambiente se ha estado encargando de la franja de seguridad de la interfaz de la comuna. Se construyen cortafuegos y limpia el material combustible, en los sectores de Villa San Pedro, (entre el CEAT y el Colegio Concepción San Pedro, hasta la calle Los Aromos), en Idahue, los alrededores de Andalué y en Loma Colorada (en Progreso).
RESULTADO POSITIVO
Hace casi 5 años, la comuna de Chiguayante también era una de las zonas en las que la Conaf informaba de puntos de complejidad. Los sectores de Valle La Piedra I y II, Villuco y Pedro de Valdivia Alto, eran identificados como lugares donde se debía hacer silvicultura preventiva.
El encargado de Emergencia de la casa edilicia, Sixto Bustamante, contó que entre el año 2012 y 2014 se realizó un intenso trabajo para generar cortafuegos en los puntos identificados. La labor llevó a que la comuna no esté ahora considerada dentro de las comunas con puntos críticos.
"Teníamos muchos llamados a Bomberos por riesgo a las casas (...). Lo que tenemos hoy son incendios que se generan en la zona alta de los cerros. En el 50% de esos casos no se despacha a Bomberos, porque sólo interviene Conaf o la forestal", declaró Bustamante.
El encargado de Emergencia sostuvo que el trabajo también ha permitido generar conciencia en los vecinos, ya que de poco se han ido preocupando de que existan los cortafuegos, solicitando realizar esta labor el municipio para resguardar sus viviendas.