Tienda Vinomio busca comercialización de suscripciones y doblar ventas
Luego del lanzamiento de su tienda virtual, la tienda boutique de vinos Vinomio prepara el lanzamiento de la venta de suscripciones a clientes en todo el país y espera doblar sus ventas en 2017, que durante el año pasado llegaron a $ 10 millones al mes.
Sergio Garrido, el dueño de este emprendimiento ubicado en Antonia López de Bello 090, Providencia (Santiago) destacó que en la actualidad su tienda virtual llega prácticamente a todo Chile con su oferta que incluye más de 220 etiquetas provenientes de pequeños productores y bodegas independientes. Las etiquetas que se comercializan provienen desde bodegas desde Atacama hasta la entrada de la Patagonia chilena.
pocos datos
Garrido, quien partió en este negocio por su gusto por los mostos y sin tener conocimientos de sommelier ni enología, trabaja en la actualidad junto a seis personas en la tienda boutique y afirma que se decidió a entrar en esta industria pues encontraba poca información del mundo del vino.
"Estamos promoviendo una mirada distinta, a escala humana y con pequeñas producciones vitivinícolas", afirma sobre su tienda.
Respecto de la motivación para vender vinos, agrega que "los puntos de venta de vinos son supermercados, que es lo más masivo. Y ahí no hay una guía o asesoría, porque encuentras un muro de botellas. La gente elige precio y ahí hay una pata coja en la industria. El público quiere aprender y saber, sobre todo los jóvenes, que han ido experimentando mayor gusto", asegura.
en el 2017
Con una inversión en el recinto de $ 190 millones y ventas por $ 10 millones mensuales el año pasado, Garrido manifiesta que "la proyección de 2017 es llegar a doblar las ventas. Es un objetivo importante, pero creo que lo podemos llegar a hacer. Y vamos a tratar de potenciar la suscripción de clientes y venta online".
Respecto de la suscripción de clientes, trabaja en dar forma en marzo de este año a un formato distintivo respecto de lo que ya existe en el mercado.
"Para diferenciarnos estamos pensando en enfocarnos en pequeñas producciones y dirigir el trabajo más a los clientes. Podemos enviar uno, dos o tres vinos al mes, dependiendo de la necesidad. La idea es darle en el gusto al cliente con algún varietal más que le asignemos una, dos o tres botellas al mes estandarizando el despacho", adelanta.