Planteles de educación superior recalendarizan segundo semestre tras tomas
Tres casas de estudios de la Región se mantuvieron movilizadas durante los meses de junio y julio, a raíz de una serie de demandas tanto nacionales como también acordes a la realidad de cada universidad. La Universidad de Concepción (Udec), Católica de la Santísima Concepción (Ucsc) y Andrés Bello sede Concepción (Unab) son aquellos recintos movilizados y por esta razón, se ha trabajado en la recalendarización del primer semestre y comienzo del segundo.
En el caso de la Ucsc, las autoridades institucionales se propusieron alcanzar un acuerdo con los estudiantes para deponer las tomas de cuatro facultades y reestructurar el calendario en función de las clases perdidas por cada facultad.
"Luego de una difícil negociación, acordamos con los estudiantes retrasar el ingreso al segundo semestre, ingresando el 16 de agosto a clases. Quienes hicieron el semestre normal ingresarán el 8 de este mes. Hoy, muchos alumnos están cerrando el primer semestre", contó Mónica Tapia, vicerrectora académica de la casa de estudios. Agregó que el trabajo se centró en acomodar las fechas para cerrar el primer semestre sin problemas.
Las actividades fueron retomadas el pasado 11 de julio con el funcionamiento académico y al día siguiente acordaron el calendario de cierre, mencionó la autoridad. "Para esos casos, el término del segundo semestre se retrasa hasta el 23 de diciembre", dijo.
En el caso de la Unab, donde la movilización se mantuvo por poco más de un mes, las autoridades plantearon que el año académico no será retrasado, ya que se implementaron distintas alternativas para terminar el primer semestre.
"Muchas carreras que no estaban movilizadas recuperaron clases en otros lugares y por ello, no se ve afectado el calendario académico", plantearon. El segundo semestre comenzará el 16 de agosto para aquellos estudiantes movilizados.
Más complicado
La situación de la Universidad de Concepción es la más compleja, considerando que se mantienen cinco facultades en toma. Desde Rectoría plantearon que para las carreras movilizadas, el año académico terminará a fines de enero y cualquier extensión en la paralización de actividades comprometerá al menos el mes de marzo del próximo año.