Alcaldes de comunas rurales apoyan incentivos para votar
Las elecciones primarias del pasado 19 de junio fueron una muestra más de que la participación ciudadana en las urnas va en un claro descenso, el que se ha ido intensificando desde el 2012 a la fecha, época en la que se modificó el voto obligatorio para dar paso al voluntario.
En la Región del Biobío, sólo el 6,2% del padrón electoral habilitado para votar en las recientes primarias. Es decir, sufragaron 48 mil 711 personas, de las 784 mil 993 que podían hacerlo. El panorama se repitió a nivel nacional y volvió a encender las alarmas sobre cómo detener dicho descenso y reflotó un proyecto de ley que ingresó al Senado el 2011 y que contempla incentivos para aumentar la participación.
Medida criticada por muchos, incluidos analistas, pero que es mirada con buenos ojos por alcaldes de comunas rurales de la Región del Biobío y que van por la reelección. Eso sí, la mayoría de ellos reconoce que en los sectores más alejados de los centros urbanos y la capitales provinciales, la comunidad aún no se ha visto tan afectada por el desinterés en la política.
Así lo demuestran las cifras. En las pasadas primarias, Ninhue fue la comuna con más participación en la Región: un 27,5% en relación al padrón electoral. Le siguieron Contulmo, con un 25,1% y Los Álamos, con un 19%. En el caso contrario estuvieron Concepción y Tomé, con cifras que promediaron el 2,5% de participación.
CERCANÍA
"En las comunas pequeñas tienen bastante responsabilidad cívica. En las primarias fue la que más gente fue a votar, por lo tanto, no creo que tengamos problemas en octubre", aseguró la alcaldesa de Ninhue, Carmen Blanco.
De todas formas, valoró los incentivos que propone el proyecto de ley que impulsa el senador Patricio Walker (DC), porque "muchas veces la gente está poco motivada o tiene sus preocupaciones puestas en otro lado", comentó acerca de la disminución en el interés electoral.
Para René Schuffeneger, jefe comunal en Portezuelo, "es difícil que la gente no venga a votar en las municipales, porque se eligen autoridades que son mucho más cercanas para ellos, situación que no se repite en las parlamentarias. Acá uno trabaja directamente con la comunidad, codo a codo, ellos nos conocen y viceversa, mientras que un diputado llega poco a la zona y la gente ni sabe quiénes son".
Además, para Schuffeneger, la mayoría de la población se quedó con la sensación de que el voto era obligatorio y son sólo los más jóvenes los más reticentes a participar.
Por otro lado, Richard Irribarra, máxima autoridad de Quirihue, postula que "en las comunas más pequeñas el compromiso se da con la persona y no con los partidos. Son las personas las que movilizan a la participación, lo que no se da en las capitales provinciales o regionales, por ejemplo".
FACILIDADES
Si bien valoran que existan incentivos y facilidades para poder sufragar, aseguran que no es la solución a los problemas actuales.
"Mucha gente se abstiene por el desprestigio de la política, no es un tema de recursos o que no puedan llegar, lo que pasa es que la gente desconfía, se aburrió de ver tantos servicios personales y mentira de lo que se ofrece cuando hay campañas", critica la alcaldesa de Coelemu, Laura Aravena.
Por otro lado, Cristián Peña, jefe comunal de Lebu, destacó que siempre la contingencia es menor en las comunas de menor tamaño. "Hay mayor compromiso para acudir, pero también más dificultades para hacerlo, por lo que, por supuesto que quizás es necesario crear alguna forma de facilitar el acceso a las urnas", señaló el edil.
OBLIGATORIO
"No estábamos preparados para el voto voluntario. Hay cierta cultura, de asumir una responsabilidad, que hoy no existe. Esto es un deber que deberíamos cumplir todos", puntualizó Irribarra.
Y es que la mayoría de los alcaldes de las comunas mencionadas están a favor del voto obligatorio, principalmente, porque el cambio se realizó de forma muy rápida, sin un paso intermedio que ayudara a procesar la importancia de poder sufragar.
En ese sentido, Jaime Gacitúa, jefe comunal de Yumbel, recalcó que "cada ciudadano debe asumir su responsabilidad con la sociedad y de que su participación es un eje relevante en la toma de decisiones. Por eso, hay que reencantar a la comunidad, invitar a que se involucren más en el quehacer municipal, que formen parte del corelato".
Esa es la tarea que esperan realizar estos seis ediles, para evitar que sus comunas se vean afectadas con una baja participación en octubre y, por ende, una baja en la legitimidad de los cargos.