"Sintonizar con la ciudadanía no puede ser el único factor para perseguir delitos"
Andrés Mahnke conoce bien el sistema judicial actual, pues por ocho años, mucho antes de asumir como defensor nacional, trabajó en los procesos de modernización del sistema de justicia, incluyendo la repartición que hoy dirige.
Esta organización es la encargada de prestar asesoría jurídica a los imputados y, desde esa vereda habló del nuevo control de identidad, aprobado recientemente por el Congreso bajo la ley corta antidelincuencia, los apremios ilegítimos denunciados por internos en la cárcel El Manzano y la realidad de los imputados mapuches con los que trabajan en la Provincia de Arauco.
Control de identidad
-Sería presuntuoso afirmarlo categóricamente, pero me parece que la aritmética ayuda en estos debates. Cuando no se fija un marco en la actuación policial, claramente se pueden producir mayores arbitrariedades y vicios en la función policial. Se puede procurar no hacerlo, pero las organizaciones del Estado no se basan en la confianza de la persona que tiene una responsabilidad, sino que en un criterio restrictivo que se fija en un marco jurídico donde se juegan y se desarrollan estas atribuciones.
Por eso, desde ese punto de vista la principal objeción que hemos tenido es que precisamente no hay ningún propósito objetivo ni ningún marco, ni territorial, ni de hechos, ni de presunciones, ni de prevenciones que orienten la labor policial. Y si esta no está orientada, claramente estamos en un terreno que se pueda generar arbitrariedad.
-Mientras menos regulada estén las atribuciones, no solamente de los policías, de cualquier organismo del Estado, va a ser bastante más ineficiente la labor policial. Hoy, sin la modificación legal, tenemos al año 2 millones de controles de identidad y con un marco que tiene ámbitos de investigación y prevención en 4 hipótesis bastantes establecidas. Algunos estudios y últimos informes que está entregando fundamentalmente carabineros muestran que aproximadamente 660 mil llegan detenidos por policía. De esos, 320 mil pasan a control de detención y sólo 24 mil de esas detenciones son declaradas ilegales. Estamos hablando de un 0,1%.
-No sólo el gobierno, el parlamento también.
Es necesario que las autoridades políticas tengan estos propósitos de sintonizar con la ciudadanía. Es evidente que es parte del juego político, pero no puede ser esa la única variable a considerar. Uno puede sintonizar, pero si la ciudadanía está buscando soluciones que no son las mas eficientes para resolver los problemas, las autoridades políticas tienen que poner una barrera, no sólo para buscar soluciones eficaces, sino para explicarle a la comunidad por qué no esa vía, porque no basta con buscar la eficiencia y la rapidez en la función policial y que se pueda condenar rápidamente a cualquier persona sin un control fuerte de sus derechos y garantías.
-Sí, es altamente preocupante, y no sólo ahora, es una constante del funcionamiento del sistema penitenciario de nuestro país.
Hay un gran déficit en todo lo que pasa después del termino del juicio. Invertimos muchos recursos en dotar a todos los órganos responsables de la prevención la investigación, el juzgamiento y la sanción, pero luego de eso seguimos con un sistema que es bastante precario desde el punto de vista penitenciario y un sistema inexistente desde el punto de vista jurisdiccional que pueda controlar esa labor penitenciaria.
Zona de Arauco
-Hay muchas ausencias de regulación en nuestro marco jurídico y me parece que respecto de quienes participan reiteradamente en ilícitos o que están en situaciones de exclusión, se cometen excesos por el procedimiento policial. Sin ser autocomplaciente, siguen siendo situaciones excepcionales en la mirada país. Respecto de las comunidades, se producen ciertos estigmas porque no se conoce a la cultura que tenemos al frente. Tenemos que trabajar en poner un puente entre esas dos culturas, porque son personas que están entendiendo el lenguaje y las conductas de una forma distinta de como la está entendiendo el otro, lo que es un terreno bastante propicio para que se produzcan abusos y excesos.
-Cada vez que hemos recurrido de amparo frente a privaciones de libertad o ciertas conductas durante una investigación es muestra de aquello. Más allá de la visión que podamos tener, el poder judicial ha tenido una visión bastante uniformada en cuanto a ratificar estos excesos y por lo tanto, ordenar la inmediata libertad de las personas o el inmediato término de la arbitrariedad que se está cometiendo en su contra.
-No tengo antecedentes para responder esa pregunta. Nuestra línea de defensa indígena lo que busca es atender la mayor vulnerabilidad de los pueblos originarios precisamente buscando la igualdad ante la ley. Los ilícitos que atendemos son de la más variada índole y cuando vemos nuestras estadísticas vemos que son ilícitos bastante comunes. Los casos que están vinculadas a estrategias delictuales o muy reiterada en cuanto a su comisión son bastante pocos. Lo que sucede aquí son delitos bastante parecidos a los que enfrentamos en otras persecuciones penales.