Imputan a Cristina Fernández por enriquecimiento ilícito
La justicia argentina puso la mira sobre otra compañía de la ex presidenta Cristina Fernández dedicada a los negocios inmobiliarios por sus conexiones con dos importantes empresarios involucrados en causas de lavado de dinero y evasión impositiva.
El fiscal federal Carlos Rívolo imputó el lunes a la ex Mandataria y a su hijo Máximo Kirchner, ambos titulares de la empresa Los Sauces S.A., por los presuntos delitos de enriquecimiento ilícito y falsificación de documentos públicos.
La causa es investigada por el juez federal Claudio Bonadío, el mismo ante el cual compareció Fernández hace dos semanas por supuesta defraudación al Estado en la compra de dólar futuro dispuesta por el Banco Central durante su gestión.
Los Sauces S.A. es una firma constituida en 2006 por el entonces presidente Néstor Kirchner, fallecido en 2010, en sociedad con Fernández y el hijo mayor de ambos para administrar propiedades de la familia.
Según la denuncia de una diputada opositora que detonó la investigación, esta compañía habría arrendado inmuebles a dos empresarios muy cercanos a la familia y que actualmente son investigados por el exponencial crecimiento de sus negocios durante los 12 años de mandato de los Kirchner a partir de 2003.
Uno de ellos es el empresario de la construcción Lázaro Báez, quien amasó una fortuna gracias a la obra pública y está detenido desde principios de abril bajo el cargo de lavado de dinero por US$ 5,1 millones.
El otro cliente de los Kirchner en Los Sauces S.A. es el empresario Cristóbal López, quien a partir de millonarias ganancias obtenidas en casinos se expandió a otros negocios como petróleo y medios de comunicación. López es indagado por supuesta evasión de US$ 550 millones al Fisco.
Para la diputada nacional Margarita Stolbizer del Partido GEN, quien presentó la denuncia a principios de abril, estos arriendos en realidad encubrían el pago de comisiones a los Kirchner por favorecerlos con obra pública y otros negocios.
Fernández, presidenta entre 2007 y 2015, y su hijo son investigados también por los negocios inmobiliarios de otra empresa, Hotesur S.A, a partir de irregularidades detectadas en sus registros contables. En esta firma también se comprobó una relación comercial con Báez.