Isla Santa María: vecinos exigen plazos para resolver demandas
En vez de baños, en la isla Santa María sólo hay pozos sépticos o fosas de PVC, porque ahí no existe alcantarillado y además el recurso agua escasea. Tampoco hay retiro de basura en las casas, por lo que para eliminarla deben quemarla, enterrarla en sus patios o lo que es peor: botarla en alguna de las hermosas quebradas de ese borde costero.
Esos problemas ameritan hace años la intervención urgente de las autoridades. Y no son los únicos que denuncia la comunidad de la isla. Por eso se reunió el Consejo para la recuperación Ambiental y Social (Cras) de Coronel, un órgano que reúne a 12 representantes del Estado, otros 12 de la sociedad civil, 13 del mundo empresarial, y otros 3 del sector productivo local.
Esa instancia, que tiene la misión de consensuar soluciones a este tipo de problemas en la comuna de Coronel, a la que pertenece la isla Santa María, sesionó ahí para escuchar de boca de los propios isleños la problemática. Éstos últimos demostraron en la reunión que las dificultades son muchos más, y autoridades medioambientales proyectaron el curso y los plazos para ponerles fin de manera definitiva.
PROBLEMÁTICA MÚLTIPLE
La jornada se concretó en la escuela Francisco Coloane en el Puerto Sur de la isla. Hasta ahí llegaron representantes del Cras, entre ellos el seremi del Medio Ambiente Richard Vargas, que lideró las reuniones con una cincuentena de vecinos que expusieron la situación de abandono en que se encuentran.
"Llegamos creyendo que había tres problemas importantes, pero vamos viendo que son más de 30", dijo horas después uno de los miembros del Cras.
Durante la reunión, que duró cerca de tres horas, los vecinos detallaron los problemas que hoy los urgen. Además de la falta de vertederos de basura sufren por la disminución de los cauces de las aguas, varazones de jibia que se descomponen generando mal olor y contaminando la costa, generación de zoonosis y exceso de perros abandonados y falta de verificación sanitaria por el faenamiento de vacunos sin certificación.
Tampoco tienen áreas de pastoreo y además acusaron un tratamiento inapropiado de las aguas servidas, como también la drástica disminución de recursos marinos sin razón confirmada.
FALTA DE AGUA
La presidenta del Comité de agua potable rural del Puerto Norte de la isla, Mirse Muñoz, explicó que "tenemos un grave problema de escasez de agua potable. Se ejecutó un programa de agua potable rural interviniendo una vertiente que hoy no da abasto para la comunidad, lo que acarrea problemas económicos, sociales y sanitarios. Hoy tenemos que comprarle agua a Puerto Sur, teniendo nuestro propio proyecto desde la misma fecha que ellos. También tenemos problemas con la energía eléctrica, porque por el sistema que tenemos si se corta la luz quedamos sin agua. Nuestros sitios están llenos de hoyos donde enterramos la basura y las fecas".
Agregó que después del terremoto del 27/F les entregaron casas donde se colocaron fosas de PVC, "pero a nadie se le capacitó para usarlas, no hay una empresa que haga el vaciado de esas fosas, que empezaron a colapsar y los vecinos las comenzaron a romper".
EROSIÓN CRECIENTE
Otra isleña, Juana Monsalve, contó que "acá la jibia vara en cantidades tremendas. En dos días eso se descompone y nos contamina el agua del borde costero y se pone todo hediondo. Se han ido perdiendo recursos marinos orilleros como el chape, el loco y los piures, que hoy ya no se ven".
"La isla tiene dos puertos, Sur y Norte, y en este último hay una situación grave con el problema de la erosión por efecto del viento y la lluvia. Santa María se está achicando cada vez más porque no hay un tratamiento con cortinas cortaviento para evitarlo. Se podrían usar árboles que arraiguen la tierra y contengan el viento en el borde", dijo Gonzalo Cañumir, quien trabaja en el programa Prodesal y que aborda la problemática de ganaderos y agricultores de la isla.
De ese mismo programa municipal y del Indap, el encargado, Israel Lagos, explicó que "actualmente hay focos de tuberculosis en los bovinos, lo que se está abordando con el SAG. También hay temas con los perros vagos y la zoonosis. Estamos viendo si habrá también problemática con la posible presencia de triquina con los cerdos".
Manuel Núñez, otro de los vecinos de la isla Santa María, explicó que "hoy no se puede hacer ganadería. Pedimos las más de 1.300 hectáreas que la Armada tiene acá a través del ministro de Bienes Nacionales, para que nos entreguen esos terrenos para cultivo y criar ganado, lo que nos ayudaría a poder generar más trabajo, porque la pesca ya no da. Hoy acá en la isla nadie puede tener una huerta, simplemente porque no hay terrenos buenos ni sistema de riego, la mayoría de nuestras praderas no sirven para eso, pero en ese espacio sí se podría", dijo.
PASOS A SEGUIR
En el Cras también participa la Consejera Regional (Core) Tania Concha, la única Core que desde esa instancia hoy forma parte del Consejo. Afirmó que "lo mejor que pudimos hacer es llevarnos al continente esos treinta y tantos problemas de vuelta. Ahora hay que verlos en la Comisión de Medio Ambiente, donde expondré esta situación, para buscar la comprensión y colaboración de mis colegas con el fin de contar con su disposición para solucionar en gran parte la situación de abandono que hoy vive la isla Santa María".
Finalmente, el seremi del Medio Ambiente, que lideró la jornada, proyectó los pasos que ahora se deben dar: "Lo primero es incorporar estas demandas de la ciudadanía en el programa de recuperación. Eso tiene un conducto para obtener proyectos y presupuestos. En segunda línea hay problemas de más fácil solución, que requieren trámites intersectoriales. La idea es que este año, después del diagnóstico, se propongan soluciones y se pase a la consulta ciudadana para una propuesta de proyecto definitivo que se presenta ante el consejo de Ministros, que luego lo deriva a la Presidenta que a su vez lo deriva después a Contraloría para visar los recursos".
Vargas mencionó que la idea con esto es encontrar fondos para empezar con las soluciones a partir del próximo año.