Contraloría aprueba licitación por Puente Bicentenario
Este lunes la Contraloría General de República tomó razón del proyecto de terminación del Puente Bicentenario, lo cual fue anunciado ayer por el seremi de Obras Públicas, René Carvajal.
El pasado 4 de febrero Contraloría emitió un dictamen que frenaba el visado al proceso de licitación, que daba a Besalco S.A como la empresa adjudicataria para terminar las obras del puente Bicentenario.
En el dictamen, Contraloría se abstuvo de aprobar el contrato, ya que no se cumplía con entregar todos los antecedentes respecto de uno de los profesionales involucrados en el proyecto. Criterio por el cual el Ministerio de Obras Públicas habría desechado otras empresas de la adjudicación del proyecto.
Ante ello, el MOP debió entregar una respuesta a la entidad, con todos los antecedentes faltantes.
Pese a lo anterior, las autoridades estaban confiadas en superar el obstáculo del ente fiscalizador, siendo incluso el ministro Alberto Undurraga quien en una visita a Dichato desmintiera la preocupación por el dictamen.
LO QUE VIENE
Según explicó el titular del MOP en el Biobío esta iniciativa "va a demandar una inversión de 28 mil millones de pesos y la empresa adjudicada es Besalco. El programa de ejecución, que contempla tres etapas consecutivas, implica un tiempo de 810 días".
Agregó que "próximamente la empresa deberá entregar todos los antecedentes para la protocolización del contrato y así dar pie para el inicio de las obras, lo que es una muy buena noticia para la Región y Concepción".
Besalco S.A tendrá así carta abierta para comenzar con la segunda parte del puente, donde la primera etapa consiste en desmantelar la infraestructura mecano, medida provisoria post terremoto de 2010. Luego se realizarán las obras para crear el enlace en el lado sur, en San Pedro de la Paz.
El último paso será la construcción del enlace por Concepción, donde el puente debe conectar con avenida Chacabuco. Ahí las autoridades regionales deberán tener solucionado el conflicto en Aurora de Chile, donde las familias ubicadas en el sector del enlace esperan una solución habitacional antes de salir de sus actuales casas.