Quieren mantener el nivel y dar el gran golpe en el Coliseo
Viernes por la mañana en la Casa del Deporte y la tranquilidad se percibe en el ambiente. El bus espera desde las siete de la mañana, uno a uno comienzan a llegar los jugadores y el viaje comienza. Otro viaje más, que esperan sea el último de una larga temporada.
Universidad de Concepción enfrenta hoy y el domingo a C.D. Valdivia por el tercer y cuarto punto de la serie final de la Liga Nacional de Básquetbol en la capital de la Región de los Ríos.
El plantel viajó durante la mañana de ayer con la ventaja 2-0, tras las dos victorias en el gimnasio estudiantil y la convicción del buen trabajo a lo largo de la temporada. El triunfo del domingo pasado por 25 puntos de ventaja, avivó aún más la ilusión de cerrar la serie pronto.
Mientras llegaban uno a uno al frontis del recinto, el bus afinaba todos los detalles para tener un viaje tranquilo, que alcanzaría las siete horas. El frío y un poco de sueño no eran suficientes para bajar la ilusión por un título, que Concepción ha esperado por mucho tiempo.
"Afrontamos los partidos con la tranquilidad del 2-0, pero con la responsabilidad, concentración y compromiso de todos ahora nos queda concretar lo que se ha trabajado y se repita lo que ocurrió el fin de semana pasado", afirmaba el alero y capitán, Patrick Sáez.
"Estamos tranquilos porque sabemos cómo tenemos que jugar. Encontramos la línea de juego que sabemos que si la ejecutamos como Pablo (Ares) quiere, tenemos muchas probabilidades de ganar la serie", agregaba el base-escolta Pablo Coro.
LAS CLAVES
Algunos guardan sus cosas, otros conversan con los integrantes del staff técnico y uno que otro corre para llegar a tiempo. En el momento que eso ocurre, surgen las principales claves para afrontar los duelos en el Coliseo Monumental Antonio Azurmendy, que se espera que cuente con sobre cuatro mil personas.
"Ellos juegan en su casa y deben hacer respetar su localía. Sabemos que será un partido duro pero como equipo estamos preparados y más fuertes para lo que se viene. Será un clima hostil, todos lo sabemos, y nosotros vamos a eso, a tratar de ganar un partido primero y si ganamos el sábado, iremos por el domingo", puntualiza el alero Claudio Naranjo, añadiendo que "ellos tienen mucho que mejorar, demostraron muchas falencias sobre todo el día domingo. Nosotros estuvimos bastante sólidos, así que vamos a mantener lo que hicimos acá. Ellos mostrarán cosas nuevas, esperamos que se confundan y no les resulte lo que han planificado".
Además, "Calulo" hace un especial hincapié en la extensión de plantel que tienen respecto al rival, que quedó de manifiesto el pasado fin de semana: "Ese escenario se repetirá durante toda la serie y ahí nosotros sacamos ventaja, la intensidad que proponemos y la ventaja de poder dar dos o tres fouls a cada jugador, ellos no la tienen. Van a querer jugar intenso, pero tienen cuatro o cinco jugadores no pueden regalar fouls en el primer cuarto. No tienen el margen que podemos tener nosotros y si no, entrará alguien de la banca y aportará igual o más que quien enteró de titular, como se vio la semana pasada. Seguiremos jugando así y veremos que preparan en defensa".
Por su lado, Patrick Sáez analizó que "serán partidos complicados, ellos con su gente, En el primer partido sobre todo ellos tratarán de volver a combate. Nosotros debemos impedir eso y será complicado, en una cancha con una gran capacidad, la euforia de su gente. Debemos estar fríos de cabeza para impedir que vuelvan a la serie".
¿EL ARBITRAJE CUENTA?
Mientras los norteamericanos llegan para cerrar el plantel y la puerta del bus, el tema del arbitraje no se esconde y se analiza de cara a lo que puede ocurrir en Valdivia: "El primer partido, ellos le echaron la culpa al arbitraje de no poder cerrar el triunfo. Creo que en los dos partidos no influyo, si se equivocaron en algunos cobros, pero no generaron cambios en el marcador final. Sabemos que allá, con la opresión de su gente y su entrreandor, los cobros serán más positivos para ellos. Debemos estar preparados, lo conversamos y no nos meteremos con ellos, haremos lo que corresponda. Tenemos un equipo largo, si hay algún cobro entrará el compañero a ayudar", afirma Claudio Naranjo, mientras Pablo Coro cuenta que la situación fue discutida en la semana: "Lo hablamos en la semana, sobre todo con los extranjeros que aún no entienden cómo funciona el arbitraje acá, pero es una final y debemos jugarla como sea donde sea. No pensaremos en eso, nos enfocaremos en jugar y defender bien".
Llegan todos, la puerta del bus se cierra pasadas las ocho de la mañana, todos los jugadores llegan sin lesiones y uno de los tramos finales del camino comienza. Un camino que ha tenido buen básquetbol, cohesión y que espera en el Coliseo cerrar con un triunfo, los brazos al cielo y el grito de campeón silenciando una caldera. Universidad de Concepción no piensa en otra cosa.