Mejoran protocolo por hanta en atención primaria
Aunque para esta temporada, a la fecha no hay casos confirmados de hanta, la preocupación se mantiene, considerando que Ñuble y Biobío son las provincias que concentraron la mayor cantidad de casos a nivel nacional en las temporadas anteriores.
Es en este contexto que el Servicio de Salud Ñuble reforzó la vigilancia en toda la red asistencial, partiendo por la atención primaria. El objetivo de este plan es que el equipo de salud esté alerta sobre los principales síntomas, a los que deben prestar atención para detectar esta patología.
"Por la alta ruralidad en nuestra provincia, la experiencia nos indica que no basta con que un paciente presente fiebre, dolor muscular o de cabeza, muy similar a lo que ocurre durante un resfrío común. Para sospechar de la infección por este virus es también muy importante conocer las características del entorno en que la persona desarrolla su vida cotidiana, como su vivienda, trabajo, o las actividades realizadas en las últimas semanas", comentó el director del Servicio de Salud Ñuble, Iván Paul.
Agregó que se consideran como antecedentes de riesgo: excursiones o trabajo en áreas rurales, donde existan roedores silvestres, especialmente en áreas sin ventilación ni luz solar; actividades como desmalezamiento, limpiar casas deshabitadas o bodegas. "Por ello, el llamado es a realizar este tipo de actividades tomando todas las medidas de prevención", puntualizó el facultativo.
Jacqueline Brevis, asesora del departamento de Redes Asistenciales, explicó que los centros de salud comunales son generalmente la puerta de ingreso de los pacientes, por ello se han adecuado los protocolos para consignar en su ficha de atención esta sospecha diagnóstica al ser derivado al hospital de referencia, lo que mejorará las oportunidades de detección y tratamiento.