Consejo Regional: año 2015 terminó con cifras históricas
La administración superior de la Región radica en el Gobierno Regional, que está constituido por el Intendente y el Consejo Regional, este último es un órgano colegiado de carácter normativo, resolutivo y fiscalizador, encargado de hacer efectiva la participación de la ciudadanía. Como Core hemos avanzado hasta alcanzar la elección directa de las y los 28 Consejeros, y se estableció la elección del presidente del Consejo Regional, así como sus funciones y atribuciones.
Uno de los mandatos es el necesario ejercicio democrático y republicano de dar cuenta a la ciudadanía de la inversión pública, sobre todo en estos tiempos en que se exige transparencia en el accionar de las autoridades, siendo esta la primera oportunidad en que están involucrados tanto en la aprobación de iniciativas, como en la ejecución presupuestaria, montos superiores a los 100 mil millones de pesos lo que las convierte en cifras históricas.
Este año nuestro trabajo se ha visto reflejado en 24 sesiones ordinarias y 245 reuniones de comisiones para abordar diversos temas. En este periodo hemos aprobado M$ 142.362.942 donde M$ 30.199.487 fueron para la Provincia de Arauco; M$ 23.346.034 Provincia de Bío Bío; M$ 30.385.736 Provincia Concepción; M$ 20.639.963 Provincia de Ñuble y M$ 24.491.602 de carácter regional.
Además hemos protagonizado importantes hitos políticos como la aprobación para la creación de Ñuble Región; la aprobación de la nueva Estrategia Regional de Desarrollo 2015-2030; hemos organizado encuentros con autoridades para exigir más atribuciones y hacer un aporte relevante a proceso de descentralización; y se inauguraron las dependencias del Core para la provincia de Ñuble.
En desafíos seguiremos trabajando con sesiones en terreno y tomar así mejores decisiones no para la gente, sino "con" la gente, mientras que en el primer trimestre del próximo año esperamos inaugurar la sede de la provincia de Bío Bío.
Seguiremos trabajando en desarrollar una gestión centrada en las personas, más que en las obras, en la participación descentralizada y activa por sobre las decisiones unilaterales, en una visión territorial y sustentable de la inversión y del desarrollo, a construir y gobernar desde lo local, y comprender que las y los ciudadanos, quieren ser parte de manera protagónica de lo que se construye en su espacio.
Hay aquí pues un imperioso desafío. Todos estamos llamados a construir una mejor Región. Por eso seguiremos trabajando con fuerza para exigir más descentralización, más poder de decisión local, autoridades con atribuciones y en sintonía con las necesidades de nuestros compatriotas.