Oficina Nacional de Asuntos Religiosos expone modificación a la Ley de Culto
Con el objetivo de dar a conocer el Proyecto Modificatorio de la Ley 19.638, o Ley de Culto (promulgada en 1999), funcionarios de la Oficina Nacional de Asuntos Religiosos (Onar) realizó ayer una exposición frente a diferentes líderes de distintos credos en la Región.
En el auditorio del Servicio de Salud Concepción se llevó a cabo la reunión, en la que se escucharon las propuestas de los asistentes, las que serían consideradas en las etapas finales del proceso.
Con un trabajo hecho en varias ciudades del país, la Onar busca acercar sus modificaciones a la mayor cantidad de líderes posible.
HISTORIA
Uno de los asistentes, Luis Orellana, historiador del movimiento Pentecostal, explicó que "se trabajó largamente con el ex presidente Aylwin y Frei Ruiz-Tagle, con quien finalmente se dictó la Ley de Culto en 1999".
"Esta ley reconoce a las iglesias como entidades de derecho público. Con la normativa anterior se le solicitaba al Ejecutivo, a través de esta normativa, el reglamento 110, la concesión de la personalidad jurídica y cada año las iglesias tenían que rendir un informe narrativo y financiero de sus actividades", detalló Orellana.
"Esta nueva ley concede igualdad religiosa y las iglesias estrictamente se registran en el Ministerio de Justicia, pero ya no tienen que rendirle más cuentas. Esa ley se está perfeccionando, hay un esfuerzo del Ejecutivo así como de los pastores, llenar un vacío en la ley", dijo. El historiado calcula que todo este proceso llevará tiempo.
PROPUESTAS
Omar Cortés, asesor de la Oficina Nacional de Asuntos Religiosos y uno de los expositores, explicó que la reunión se da tras "un proceso que lleva como 8 meses de escucha de las mismas entidades". Lo anterior, porque "la comisión recogió todo eso y en función a ello elaboró las propuestas que entrarían a trámite parlamentario una vez que la Presidenta lo anuncie, seguramente de aquí a fin de año".
Los expositores dieron a conoces aspectos como "la igualdad religiosa (...). Se agregan algunos elementos que permiten que el registro (de las entidades) tenga cierto seguimiento, para que no se registren actividades religiosas y de ahí nunca más el Estado sepa de ellas", sostuvo Omar Cortés.
Asimismo, el asesor agregó que se busca tener "mayores precisiones de lo que entendemos como entidad religiosa, precisiones respecto de poner límites (...)". Esto, ya que hay organizaciones muy autopocéntricas, es decir, no tienen un elemento de mediación sagrada que se pudiera reconocer como un culto y un rito religioso.
Eso sí, quieren dejar claro que "lo decimos desde lo negativo para no parecer como interventor respecto de cómo el Estado va a definir lo sagrado", insistió Cortés.
Por último, algo que resaltaron fue lo concerniente a lo tributario: "Lo que pasa es que a veces no hay una clara delimitación entre lo que el Estado puede subsidiarle a la iglesia o no. El culto no puede ser subsidiado por el Estado, pero si la iglesia tiene proyectos sociales, que de verdad los tienen, y si generan un proyecto, el Estado tiene que estar presente ahí", explicó el asesor. Y para ello, la iglesia debe crear una estructura legal.
REACCIONES
Milton Alaña, presidente de la Iglesia Adventista para la zona centro sur, consideró que es bueno por parte de Onar "abrir la mesa para que más allá de que algunos de los que se encuentran aquí ya hemos participado en Santiago, en el Ministerio y en la Onar haciendo las leyes, se amplíe y así muchos otros obispos y pastores, puedan también dar su opinión. Creo que todas son importantes".
Asimismo, agregó que "la ley no es invasiva, la Constitución nos respeta. Que sea más práctica o más fácil ejercerla depende concretamente de la corporación, en nuestro caso".
En tanto, y en un plan similar, Martín Hirsch, representante de la comunidad israelita de Concepción, expresó que "lo de que la ley se perfecciona eso lo saben los abogados, pero hay una parte que nos impresionó mucho, y es que el Estado está promoviendo el diálogo interreligioso. Desde la religión judía siempre hemos sido promotores de los diálogos interreligiosos, ya que eso disminuye la intolerancia".
Por último, y entre las propuestas, Konrad Popp, de la comunidad Bahai de la Región del Biobío, manifestó que "es importante que las decisiones que se tomen, por ejemplo el traspaso de bienes, inversiones, o sobre todo con temas que tiene que ver con el derecho público, debieran estar escrituradas".
Como una manera de acercar su postura, Popp explicó que "en el caso de la religión Bahai no hay sacerdotes o pastores. Toda comunidad Bahai se rige por una institución elegible que se elige cada año, lo que llamamos asamblea espiritual local en cada localidad, y los miembros son independientes en sus decisiones, las que se toman por mayoría".