El grupo yihadista Estado Islámico (EI) se atribuyó en un comunicado difundido por internet, el doble atentado suicida que provocó ayer al menos 40 muertos y 200 heridos, según las últimas informaciones, en un feudo del grupo chií libanés Hezbollah ubicado en el sur de Beirut, ciudad libanesa.
"Los soldados del califato pudieron colocar una motocicleta explosiva en la calle Huseiniyah, en Burch Barachne, donde Hezbollah tiene su sede", señala el comunicado, que añade que "otro soldado con un cinturón explosivo dio su vida".
"No nos calmaremos hasta que nos venguemos", agrega el comunicado de la organización terrorista.
Según la agencia oficial libanesa NNA, las detonaciones se produjeron en un intervalo de cinco minutos y a sólo 150 metros de distancia.
En tanto, de acuerdo con la emisora televisiva LBC, en total cuatro atacantes suicidas estaban en la zona, pero uno huyó y el otro fue asesinado antes de poder detonar su carga explosiva.
El Primer Ministro del Líbano, Tammam Salam, declaró el viernes día de luto. Mientras, importantes políticos llamaron a los libaneses a la unidad.
En los últimos dos años se produjeron ataques similares en la capital libanesa y el país se ha visto también afectado por la guerra civil de la vecina Siria.
Hezbollah apoya al régimen del Presidente Bashar al Assad, mientras los sunitas libaneses apoyan a los rebeldes opositores. Los rebeldes sirios han amenazado con bombardear áreas de Hezbollah por su apoyo a Al Assad.
BLOQUEO
En tanto, los combatientes peshmerga kurdos iniciaron una ofensiva en el norte de Irak para expulsar al Estado Islámico (EI) de la ciudad de Sinyar y lograron bloquear una importante ruta de suministro de la milicia terrorista hacia Siria.
El EI tomó el año pasado la región, habitada sobre todo por la minoría de yazidíes, y desplazó a decenas de miles de personas.
Según medios locales y fuentes del Pentágono, citados por DPA, los aviones de la coalición liderada por Estados Unidos llevaron adelante ataques aéreos contra objetivos de EI.
En la lucha también están involucrados militantes del proscrito Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), de acuerdo a la agencia de noticias kurda Fira.
El consejo de Seguridad del gobierno autónomo kurdo informó en Twitter que en la ofensiva terrestre participan 7.500 combatientes peshmerga.
Los objetivos son la expulsión de EI de la ciudad de Sinyar, la reconquista de rutas de suministro estratégicas y la creación de una zona tapón alrededor de la ciudad para proteger a los residentes de los ataques de artillería.
Sinyar es de gran importancia estratégica dado que la ciudad se encuentra sobre una importante ruta de conexión entre dos bastiones de EI, Al Rakka en Siria y Mosul en Irak. Además, Sinyar forma parte de los territorios que se disputan el gobierno autónomo kurdo en el norte de Irak y el gobierno central en Bagdad hace años. La ciudad es asimismo de gran importancia simbólica como bastión de los yazidíes.
De acuerdo con los kurdos, los peshmerga atacaron desde tres direcciones y avanzaron sobre el norte de Sinyar y otros pueblos.
En tanto, los extremistas perpetraron ataques suicidas contra los kurdos. En una declaración difundida en Internet, explicaron que decenas de atacantes kurdos murieron y otros tantos resultaron heridos.