Dentro de las próximas semanas debería estar llegando a las manos del ministro Carlos Aldana la declaración, por oficio, que la ministra de la Corte Suprema, Rosa Egnem, debe entregar por el crimen de 19 trabajadores de la papelera en Laja y de Ferrocarriles del Estado, tras el golpe militar de 1973. El requerimiento a la magistrada del máximo tribunal del país, en calidad de testigo, se realizó el lunes 26 de octubre, luego que el pleno de la Corte Suprema autorizara la solicitud de Aldana para realizar la pericia.
"Llegó esa autorización y se le despachó el oficio a la ministra con los antecedentes y la minuta de preguntas", expuso el ministro de la causa, quien también es el presidente de la Corte de Apelaciones de Concepción.
Cabe recordar que se trata de una petición formulada por los querellantes de la causa, fundamentada en que la ministra requerida era secretaria del Juzgado de Letras de Yumbel en 1973, y en su calidad de jueza (s) -la titular Corina Mera estaba con licencia- habría ocultado el parte de inhumación ilegal entregado por el comisario de Yumbel, Héctor Rivera, además de alterar registros judiciales.
EN 30 DÍAS
Pese a que no existe un plazo legal, ni tampoco judicial, para que la magistrada responda a las consultas que se le realizó mediante oficio, el ministro Aldana sostuvo que debería ser en un plazo prudente. "Es un plazo estimado que siempre se espera cuando se contesta por oficio. Son alrededor de 30 días, de corrido", informó el juez que lleva las causas de violaciones de Derechos Humanos.
El ministro Aldana también aclaró que aún está la posibilidad de que la magistrada de la Suprema opte por declarar de forma presencial, y no por oficio, como se espera hasta el momento.
"Ella (Egnem) tiene la prerrogativa de decir renuncio al derecho que me otorga la ley, que es declarar por oficio, y, yo declaró personalmente ante el ministro", expuso Aldana, dando cuenta que la ministra de la Suprema puede renunciar a este derecho dentro de los mismos 30 días en los cuales debería responder mediante esta vía administrativa.
En cuanto a la importancia que tendrá la declaración de la ministra Egnem, el magistrado de la Corte de Apelaciones opinó que era pertinente conocer los antecedentes que pudiera del caso. No obstante, aclaró que la ponderación que podría tener en su investigación se tendrá que valorar una vez que llegue el testimonio a sus manos. "Toda declaración que se preste en una causa penal es útil. Para mí es útil lo que ella declare, que tan importante e implicación tendrá, eso se verá cuando ella envíe o preste su declaración", dijo Aldana.
INDEPENDENCIA
Uno de los puntos importante que traería la declaración de Egnem es si ésta cometió algún delito al no dar cuenta del hallazgo de los cuerpos. Se debe recordar que los familiares han solicitado de forma expresa la renuncia de la ministra a su actual cargo, y más de alguno, de manera interna, estimó que es difícil que se pueda acusar penalmente a la ministra de encubrir el hecho con sus acciones.
Respecto a esta situación, el ministro Aldana, sin profundizar en el tema, declaró que el juez que investiga debe tener independencia en sus decisiones.
"Dentro de mis competencias yo tengo que investigar a un ministro de la Corte Suprema, lo hago con absoluta independencia, y veo cualquier implicancia que pueda tener. Si yo viera que no me siento con la libertad, autonomía y con la independencia suficiente, me inhabilitaría", expuso el ministro de la Corte de Apelaciones, quien aseguró que "cuando tenga los antecedentes resolveré de acuerdo a mi conocimiento, independencia y competencias lo que corresponda".
Actualmente, en el caso Laja -San Rosendo hay una docena procesados, y existe un recurso de apelación por parte del abogado Adolfo Montiel para que también se incluya a ese listado a Pedro Jarpa Forester, quien era jefe de seguridad de la papelera, y sindicado como la persona que señalaba a Carabineros quiénes eran los trabajadores buscados, y que, posteriormente, fueron fusilados por los uniformados.
Es por eso que el ministro Aldana sostuvo que aún falta para que se emitan las sentencias.