Presencia de bacterias es causa de infecciones urinarias
Uno de los inconvenientes a los que gran parte de las mujeres han debido enfrentarse es a las infecciones urinarias, estimándose que el 50% ha tenido una en algún momento de su vida y que el 30% de éstas son repetición.
En mujeres jóvenes existe mayor probabilidad de tener cistitis, debido al aumento de la frecuencia en las relaciones sexuales. Lo mismo pasa con las mujeres menopáusicas, ya que por falta de estrógenos, se produce sequedad vaginal, con posibilidad de generarse heridas en el área vaginal y cambios en flora bacteriana.
La estructura del suelo pelviano femenino -como la uretra, vejiga, útero y recto- está en un espacio muy pequeño, lo que hace que las mujeres sean más propensas a sufrir infecciones urinarias.
La uretra, que es mucho más corta que la del hombre y se encuentra ubicada más cerca del ano, es la vía a través de la cual entran los microbios, bacterias, virus, hongos o parásitos que están en las estructuras vecinas.
Estas bacterias normalmente se eliminan al orinar, pero si durante el día no se orina lo suficiente, las bacterias se multiplican rápidamente, produciéndose la infección.