Inacap escogió a la mejor empanada del 2015
Infaltable en la mesa dieciochera, la empanada de pino es sinónimo de Fiestas Patrias, donde la combinación de sus ingredientes (pasas, aceituna, huevos, cebolla, carne y condimentos) le dan un toque característico a la celebración.
Un poco más picante, con o sin pasas, con la carne picada o molida. Las formas de elaborarlas son muchas, así como también las preferencias de su consumo.
Y para descubrir la mejor empanada para este "18", Inacap Concepción-Talcahuano realizó su tradicional Cata.
Este año, la Ruta de la Empanada recorrió 21 locales de las comunas de Concepción, Talcahuano y San Pedro de la Paz, las cuales fueron probadas a ciegas por Maribel Salazar, Paola Fulgeri y Víctor Ternicier; chef instructores de la casa de estudios.
En específico, los establecimientos que participaron fueron Assuan, Cordon Blue, Lunchonette, Hassel y Gretel, Pancitos, Palóu, Panadería Mei, Blassoni, Delikaten, Deli House, Leo Pan, Versluys, Rometsch, Dressden, La Carlota, Ciervos, Perales, Única, Doffey, Olimpia, Amapola.
RECONOCIMIENTOS
Entre los aspectos que destacaron los jueces estuvo el buen color y forma, además de una buena masa. Al respecto, Víctor Ternicier, afirmó que la empanada es un plato que se disfruta especialmente cuando ésta es bien jugosa, donde una buena masa y un buen relleno son esenciales. Pero, agregó que aplaude "a quien se atreve, como una empanada que tenía pasas corinto, ese dulzor distinto a la pasa rubia le otorgó un carácter particular a una de las empanadas que pasaron por nuestra evaluación".
Así, los locales distinguidos fueron la Panadería Única de Talcahuano, Panadería Amapola de Brisas del Sol, Panadería Olimpia de Talcahuano y Panadería Palóu de Concepción.
Además, este año se agregaron reconocimientos especiales. Primero estuvo el premio a la trayectoria que recibió Versluys, con sus 35 años de presencia en el mercado penquista. Endía comentó que el premio es por una empanada tradicional de horno y siempre presente en su oferta.
También se distinguió a otro producto presente en la mesa criolla de manera tradicional: la empanada frita de pino, siendo reina indiscutida la ejemplar de Lunchonette. "Fue una empanada casi perfecta, obtuvo unánimemente el voto de todos los jueces, buen tamaño, masa delicada, buen color, relleno adecuado, rica, jugosa, sólo le faltó un poco de fuerza en el sabor del pino, mínimo", contó la chef Paola Fulgeri.