De sirvienta a gran dama
Los cinéfilos penquistas estuvimos recientemente de fiesta (no todo es fútbol): Helen Mirren por partida doble. Gracias a la magia del cine nos entregó dos actuaciones notables. Primero fue una extraña sirvienta en la Hungría de los años 60, en el acomodado hogar de una escritora de éxito, en Detrás de la Puerta, en el ciclo de cine de la Universidad de Concepción; horas más tarde fue el turno de una mujer judía que regresa a su Viena natal, sesenta años después, que tuviera que partir de allí con su familia por efecto de la persecución judía, en La Dama de Oro, un preestreno ofrecido por este diario a sus suscriptores
En ambas películas Mirren hace lo de siempre: impactar con sus actuaciones, confirmar el lugar que se ha ganado a partir de buenas interpretaciones, algunas de las cuales han resultado no representar , sino ser , convertirse en el personaje, como en La Reina , que le valió los cuatro principales premios del cine mundial a una sola película (el Oscar, el Bafta, el Globo de Oro y el Premio del Sindicato de Actores) , y la admiración de la propia reina de Inglaterra que le dio el título de Dama del Imperio.
Helen es parte de esa pléyade de actores y actrices formados en el mejor teatro del mundo, el inglés. Probada en el teatro shakesperiano donde se forjan y miden los grandes y que van a triunfar. Hija de madre inglesa y de padre ruso, próxima a cumplir 70 años, sigue bella y con agenda completa, tanto en teatro, cine y televisión, lo que resulta una verdadera hazaña. Fue la inspectora jefe de policía en Prime Suspect, la serie televisiva donde debía luchar con su afición a la bebida y el machismo imperante en la policía. Actualmente está en cartelera teatral en Londres con La Audiencia, donde representa -de nuevo-a la soberana británica.
Magda Szabo(1917-2007) fue una de las principales novelistas de Hungría. Es la autora de Detrás de la Puerta, su propia historia con una empleada, Emerence Szeredas que le ayudaba en las labores de casa, mientras ella escribía. Eran los tiempos del régimen comunista en su país y la vida no era fácil, para quienes disintieran de los lineamientos oficiales. Ambas vidas chocan, pero al mismo tiempo se atraen, se necesitan. Como telón de fondo, las miserias y quebrantos que ha sufrido el pueblo húngaro tanto en la época de los nazis y la posterior de los comunistas. La cinta es dirigida por Itzvan Szavo y la música de Schumann, un acierto.
La Dama de Oro, dirigida por Simon Curtis, es la historia de María Altmann, y de su lucha por recuperar las propiedades y la valiosa colección de arte confiscadas a su familia por los nazis durante la guerra, en Viena. Entre las obras de arte está el retrato de una tía suya Adele Bloch-Bauer pintada por Gustav Klimt. La lucha que emprende ante el gobierno austríaco la hace necesariamente revivir los traumas del pasado.
El cine suele ser un viaje alrededor del mundo muy emocionante: hacer este viaje en menos de 24 horas más emocionante aún y conocer a dos personajes opuestos, diferentes, pero parecidos en los dolores del pasado.