Los Juegos Panamericanos de Toronto 2015 ya quedan en la historia y el trabajo del Comité Olímpico de Chile, representado en el Team Chile, dejó resultados con varias lecturas.
Pese a que sólo se consiguieron 29 medallas, catorce menos que el Guadalajara 2011, aumentó la cantidad de medallas de oro y muchos deportistas sorprendieron en sus disciplinas.
Por esta razón, el undécimo lugar en el medallero da pie a interpretaciones diversas y permite fijar la mirada en la metodología de búsqueda de talentos deportivos ha sido siempre parte sustancial del debate.
"Los programas tradicionales utilizan la predicción como una de sus variables la cual ha demostrado que es más errónea cuanto más pronto se hace. Por ello, las únicas marcas con un margen de error "aceptable" son aquéllas realizadas cerca de la edad de maduración de los atletas", analizó Javier García, doctor en Ciencias del Deporte por la Universidad de Extremadura, España, y académico e investigador de la Universidad Autónoma de Chile.
"Uno de los factores más crueles y determinantes es el efecto relativo de la edad. Los deportistas que más destacan en categorías inferiores son los más grandes, los más rápidos o los más fuertes, todas ellas cualidades relacionadas directamente a los años", agregó García, recordando el caso de los JJ.OO. de Atenas 2004, donde sólo el 44% de los deportistas había debutado en categorías inferiores en competencias internacionales. "Y al revés. La mayoría de las jugadoras de la selección de fútbol femenino de Estados Unidos, campeonas hace unas semanas, empezaron a centrarse en este deporte recién a partir del high school o incluso más tardíamente en la universidad, llegando a competir -entre todo el equipo- en más de 14 deportes distintos antes de especializarse", añadió.
"RECICLAJE DE TALENTOS"
Una de las alternativas que propone Javier García, quien experiencia como Entrenador Nacional de Atletismo por la Real Federación Española de Atletismo y Entrenador Superior de Baloncesto por la Federación Española, es la multiplicidad de disciplinas en el crecimiento de los chicos antes de especializarse en una sola.
"En Chile y otros países hay una superpoblación de futbolistas, con un gasto considerable en formación deportiva y donde menos del 0,1% llega al profesionalismo. ¿No será posible reciclar toda esa preparación en otras modalidades?", analizó, planteando como alternativa la identificación de talentos maduros, transferencia o reciclaje de talentos, que ya se está empleando en países como Canadá, Gran Bretaña y Estados Unidos y que busca a jóvenes de entre 17 y 25 años, con experiencia deportiva anterior, pero no excluyente para reconvertirlos a otros deportes de categoría olímpica.
LA GENÉTICA
La condición para aplicarlas estas alternativas se debe tener una suficiente cantidad de deportistas con cualidades aeróbicas de base similares y distribuirlos en otras disciplinas que no cuenten con una masa crítica, tal como ocurre en países industrializados. Conocido fue el caso de Mario Salas en nuestro país, quien tras ser parte de la selección nacional de rugby que se coronó campeona sudamericana en 1986, jugaba fútbol profesional dos años después.
"Salas se caracteriza por un biotipo mesomórfico y muscular homogéneo", dice Juan Macuer, kinesiólogo, diplomado en Terapia Respiratoria y profesor de Fisiología del Ejercicio y Rehabilitación Cardiorespiratoria de la Universidad Autónoma de Chile.
"La capacidad aeróbica está condicionada entre el 65% y el 70% por la condición genética del individuo. Si sólo el 30% de diferencia, y no más que eso, puede mejorarse con entrenamiento, ¿vale la pena entrenar para convertirse en deportista de alto rendimiento? Si los resultados las pruebas funcionales, físicas y aeróbicas no son auspiciosas entonces no tiene sentido. En ese caso es muy improbable llegar a un modelo de elite, sobre todo después de los 15 años", precisa Macuer.
Por ello, los criterios básicos de entrenabilidad son hacerlo antes de los 15 años de edad y en una especialidad acorde al biotipo, afirmando que en Chile falta un criterio más exigente para establecer las marcas o resultados mínimos que permitan a los deportistas competir a alto nivel, lo que sin duda pasa también por una suficiente disposición de recursos. "Muchos atletas se pierden porque no tienen dónde entrenar, ni equipamiento, ni un equipo de profesionales especializados que apoyen sus carreras. Basta comparar el tamaño de las delegaciones que cada país envía a los Juegos Panamericanos de Toronto 2015", concluyó el docente.