El trovador y la murga en una sociedad de alto vuelo
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Pese a su cercanía con nuestro país, León Gieco (63) no ha visitado la Región del Bío Bío con la regularidad que los penquistas quisieran. De hecho su debut en estas tierras se produjo recién hace tres años con un show íntimo en SurActivo.
El autor de 'Sólo le pido a Dios' y 'Los Salieri de Charly' regresa ahora con una propuesta en vivo totalmente distinta. Se trata de un show, que se anticipa como una gran fiesta, gracias a la participación de Agarrate Catalina, emblemática murga uruguaya de renombre internacional. La cita es hoy, 20 horas, en el Teatro U. de Concepción, como parte de la actual gira nacional, que ya los ha tenido en Santiago y Temuco.
FIESTA EN GRANDE
Sin embargo, nuestra ciudad promete un ambiente especial por su fuerte impronta afrolatina y candombera producto de la labor de agrupaciones como Barrio Sur y Africamérica. Incluso, ya se puede anticipar una respuesta más parecida a la conseguida por ambos artistas en el país vecino.
'Es que Argentina es un país consumidor de murgas uruguayas, porque tenemos las nuestras, pero la uruguaya es la originaria, y la nuestra es como un reflejo. Allá van 10 murgas de Uruguay y llenan los teatros', explicó el cantautor con 15 discos editados. Dio algunas luces respecto a esta fructífera asociación.
'Ellos me invitaron a ver dónde podía meterme, y lo hacemos en las canciones mías y las de Tabaré Cardozo (uno de los fundadores de la agrupación). Hicimos muchos conciertos en Uruguay, y en Argentina terminamos tocando en el Luna Park, un concierto que duró cinco horas y media. Todos conocen lo que hacemos, tocamos hasta en el festival de Cosquín', comentó el artista antes de tocar dos veces en el Teatro Nescafé de las Artes.
- Algo así. Él es como un hijo mío que compone, como una continuación de mis canciones. Las suyas son también sociales, y muy lindas cuando son de amor. Escuchamos la misma música: Serrat, Víctor Jara, Violeta Parra, Charly García, rock... Y toco mi parte, ellos su parte, y al final compartimos 12 ó 15 temas. Hago un íntimo interactivo y luego los presento a ellos.
- Interactúo con una pantalla. Por ejemplo, hago un dúo conmigo mismo, de la película 'Rock hasta que se ponga el sol', del año 72. Para la gente es raro ver al pibe de 18 años ahora, conmigo mismo.
- Algunas. A puro coro, por ejemplo, hacemos 'Cinco siglos igual', 'De igual a igual' y varias más. Y ahora no podemos, porque tocamos en teatros chiquitos, pero estamos viendo cómo hacer para tocar con la murga y con mi banda. Todavía no somos tan populares, porque ellos son como 20 y nosotros también somos 20 (...) Necesitaríamos un estadio.