Oportunidad en lo precario
La Región del Bío Bío presenta bajos índices de desarrollo, un claro deterioro de áreas productivas, como el acero, debido a la pérdida de competitividad y baja inversión de capitales que pudieran apoyar o diversificar la matriz productiva. Así, pareciera que la industrialización, en especial la del cordón industrial y pesquero, ha comenzado a retroceder dando paso a una crisis que no anticipamos, lo que podría convertir a este territorio en un lugar aún más frágil.
Sin embargo, toda crisis es a la vez una oportunidad si hay aprendizaje, comprensión de los alcances, diagnósticos acertados, conciencia de las fortalezas y debilidades que la ciudad o territorio nos ofrecen y capacidad de reinvención a partir del capital social y cultural.
Frente a esta realidad, se requiere de la innovación y creatividad, pero no de cualquier tipo o a cualquier costo. Se requiere de una apropiada que se plantee desde dos aspectos: el primero hacerse las preguntas correctas sobre las problemáticas importantes y la segunda es ver lo precario como una oportunidad de desarrollo.
En ese sentido, pensar en la relación de innovación, creatividad y sustentabilidad como un camino pareciera ser una contradicción si entendemos que cualquier proyecto modifica y altera su entorno. Por lo mismo, conocer las ventajas y posibilidades que nos entregan las nuevas tecnologías, así como estrategias de sistemas pasivos y soluciones innovadoras a partir de nuestras propias realidades forma parte fundamental del desafío. Entender lo propio y potenciarlo se convierte, entonces, en nuestra fortaleza. Por lo mismo, la generación de propuestas innovadoras así como la coexistencia y valoración del patrimonio, el medioambiente y el paisaje, forma parte irrenunciable de nuestra memoria e identidad.
La red virtual nos permite estar ubicados en cualquier lugar y conectarnos con el mundo; por ello, en el siglo XXI, la globalización versus la identidad local es uno de los desafíos, sobre todo frente a un país que introduce agentes externos sin mayor cuestionamiento. Es el riesgo que enfrentamos.
No podemos desprendernos de una historia e identidad de permanente cambio y transformación. Podemos ser una región con escasos recursos económicos y/o materiales, pero somos ricos en generación de talento, creatividad e innovación que han surgido desde la carencia. Nuestro territorio ha sido cuna de personas que con esfuerzo son capaces de transformar la imprecisión, lo inestable y lo frágil en valores como lo puro, efímero, escaso y genuino. Todo ello puede dar paso a construir una identidad a partir de la adversidad, de lo precario y transformarnos en una sociedad de alto valor, un bien escaso y resiliente. Sería bueno recordar que lo perfecto es enemigo de lo bueno.
Accidentes
Carabineros ha informado que 14 personas fallecieron en diferentes accidentes de tránsito ocurridos durante el fin semana largo en el país. La policía tuvo que intervenir en 517 emergencias en las calles y carreteras, que además dejaron 73 personas heridas de gravedad.
La buena noticia es que este año los accidentes no dejaron fallecidos en la Región del Bío Bío. En esta misma fecha de 2013, perdieron la vida dos personas debido a accidentes de tránsito. En los pasados días, se desarrolló en la zona una fuerte campaña de fiscalización a cargo de Carabineros, y en algunos lugares, en conjunto con personal de Senda, para controlar que los automovilistas no manejaran bajo la influencia del alcohol o de las drogas.
La fiscalización del programa Control Cero Alcohol permitió que entre el miércoles y la madrugada del domingo se realizaran cerca de 500 fiscalizaciones, las que registraron 3 personas bajo la influencia del alcohol, 11 en condiciones físicas deficientes y 2 en estado de ebriedad. De acuerdo con Carabineros, en los accidentes ocurridos en el país influyeron factores como la imprudencia de conductores y de peatones que cruzan con luz roja o por lugares no habilitados. El tema de las muertes y lesiones en las carreteras es complejo, considerando el explosivo aumento del parque automotor. De allí que las tragedias viales son la tercera causa de muerte en Chile.
Peatones, motociclistas y ciclistas son los más vulnerables y las principales víctimas fatales de los traumatismos por tránsito, de acuerdo con un estudio realizado por la Organización Mundial de la Salud. Menciona que los cinco factores de riesgo con más prevalencia en los accidentes son el consumo de alcohol, exceder los límites a la velocidad, no usar cascos de motocicleta, no usar cinturones de seguridad y asientos especiales para niños, pero a la vez destaca que Chile tiene legislaciones en todos esos ámbitos. En el mundo, son tan sólo 28 países los que tienen estas normas integrales, y cubren el 7% de la población mundial, según este informe.
De acuerdo con la OMS, cada año se registra poco más de un millón de muertes en el mundo debido a tragedias en calles y carreteras, por lo que ha llamado a las autoridades a reforzar las legislaciones y a la vez los controles para evitarlos.