Con alegría y entusiasmo para transformarse en el motor de sus propios cambios concluyeron meses de clases del Taller de Aprendizaje Popular (TAP) que la fundación Techo-Chile desarrolló con los habitantes del campamento San Ramón del Saque, quienes ya están trabajando junto a la organización desde hace un año.
Estos son cursos que se realizan en las sedes de los campamentos, comités, barrios o blocks en los que Techo trabaja y que son realizados por y para los vecinos de dichas comunidades, con el fin de entregarles herramientas que les servirán para su futuro en algo tan importante como el trabajo: el aprendizaje de un oficio.
Y es que, uno de los objetivos principales de la labor e intervención de la fundación, es empoderar a las personas para que mejoren las condiciones en las que viven, mediante una acción conjunta con los voluntarios y profesionales.
Es por lo mismo que a través de los TAP buscan potenciar las habilidades técnicas y formativas, primordiales para el futuro desempeño laboral.
En este caso, las alumnas escogieron perfeccionarse en el corte en la confección.
CEREMONIA
Para finalizar el proceso, se desarrolló una ceremonia en la que se preparó una muestra de los productos que fueron elaborados por las propias alumnas. Así, éstas junto a su monitora y sus respectivas familias, recibieron sus certificados de participación.
En la oportunidad, el director regional de Techo Bío Bío, Pedro Cisterna, dijo que este tipo de hitos son sinónimos de alegría, sobre todo considerando los buenos resultados con los que llegan a su fin. 'Sus productos son excelentes, de una muy buena calidad. Las invito a seguir en esto. Emprendan, crezcan, créanse el cuento', afirmó.