Joan Rivers deja como legado su humor y críticas ácidas en torno a la moda
La carrera de más de cincuenta años y los millones de risas que dejó tras de sí, no fueron suficientes en la batalla que la reconocida comediante norteamericana y presentadora del popular programa 'Fashion Police', Joan Rivers, mantuvo desde el pasado 28 de agosto.
Fue luego de una operación a las cuerdas vocales, donde ocurrió el incidente, cuando Rivers, quien estuvo casada dos veces, dejó de respirar y debió ser ingresada de urgencia al hospital Mount Sinai, acompañada de su hija Melissa, donde se mantuvo en coma, hasta que ayer finalmente se supo de su fallecimiento, a los 81 años.
La celebridad, con una trayectoria que la convirtió en actriz, animadora de televisión, escritora y empresaria, nació en 1933 en Brooklyn, Nueva York, destacando rápidamente en Broadway, donde hizo desplante de su recordado histrionismo y marcando el sello de buen humor que la hizo famosa a nivel mundial.
Allí, con la presentación de la obra Seawood, Rivers caracterizó a una lesbiana y conoció a la también icónica Barbra Streisand, convirtiéndose en uno de los rostros con mayor proyección, continuando su participación en películas, obras de teatro y espacios en televisión. Posteriormente comenzó su programa The Joan Rivers Show, con el que ganó en 1991 un premio Daytime Emmy como mejor presentadora de talk-show.
Sin embargo, con el debut de Fashion Police en 2010, la comediante demostró su vigencia, reforzando su fama a través de sus ácidos comentarios sobre las celebridades de Hollywood y convirtiéndose en referente obligado de fashionistas y socialités.
ENTRE EL HUMOR
Y LA MODA
Con la inmediatez de la información, los medios de comunicación y las redes sociales ardieron a los pocos minutos de que se supiera del fallecimiento de Joan Rivers, la 'policía de la moda' hollywoodense que se supo ganar al público internacional, generando impacto a nivel global.
De hecho, así como la muerte de Gustavo Cerati, el deceso de la crítica de moda comediante se transformó en 'trending topic' (temas más comentados en Twitter) en Chile con la tendencia 'Fashion Police', 'R.I.P' o el hashtag '#RIPJoanRivers'. Sin ir más lejos, al digitar su nombre en el buscador, aparecían decenas de comentarios cada minuto.
Romina Peñailillo, asesora de imagen y make up artist, reconoce que todos los días muere gente grande y que aporta, haciendo de este mundo uno mejor en todas sus formas, pero de una manera menos publicitada. Sin embargo, a pesar de la distancia, cree que el fallecimiento de Rivers afecta el lado más lúdico y humorístico de los 'fashionistas'. 'Ella era comediante y, como tal, se le recordará en especial por hacernos reír con sus opiniones fashionistas. Ella, más que aportar a la moda aportaba a la alegría de quienes comentamos o nos gusta esta área', dice. Y es que, cuántas veces se vio a Joan Rivers gozando y destruyendo muchos looks de las celebridades con su particular humor.
Con Peñailillo concuerda Camila Navarrete, periodista y 'fashion blogger' penquista (www.nosoyfashionista.cl), quien sostiene que Rivers marcó historia en el ámbito de la comedia, abriendo paso a muchas mujeres en un mundo laboral machista. 'En general las mujeres, anteriormente, no eran consideradas como chistosas. Y si bien era muy buena en eso, se albergó en el facilismo de mezclar la comicidad con sus comentarios de moda, siendo a veces incluso agresiva y cayendo en el bullying', dice.
Desde allí, aclara que, aunque Rivers nunca fue un ícono de moda porque no tenía un estilo propio, sí es un ejemplo de cómo la moda y la belleza influyen fuertemente en la presión que se le ejercía para mantenerse vigente y joven. 'Las mujeres no deberían validarse por su físico, menos aún si son tan talentosos lo que hacen, como lo era ella en la comedia', agrega.
Y es que, sin dudas, 'las alfombras rojas no volverán a ser tan entretenidas sin Joan Rivers', concluye Peñailillo.