La ministra de Vivienda y Urbanismo, Paulina Saball, defendió la labor que ha desarrollado el gobierno durante el proceso de reconstrucción de las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá tras el terremoto del Norte Grande y en Valparaíso, luego del incendio que destruyó más de 2 mil viviendas, aunque evitó establecer plazos para dar una solución definitiva a los damnificados.
Durante la interpelación encabezada por el diputado de Amplitud, Joaquín Godoy, que se extendió por más de dos horas en el hemiciclo de la Cámara Baja, la secretaria de Estado detalló que pese a los cuestionamientos de la Alianza y los problemas que aún persisten en las zonas afectadas, su cartera ha trabajado 'oportunamente' y de forma 'responsable' durante el proceso.
No obstante, durante sus intervenciones, Godoy insistió en solicitar a la titular de Vivienda que estableciera un plazo para resolver la situación de los miles de damnificados en las tres regiones y la acusó de no cumplir con la ley 12.282, que establece un plazo de 30 días para que su cartera emita un decreto que permita la fiscalización del proceso.
'Hemos cumplido con lo que la ley nos obliga y lo que nuestra ética y compromiso político nos obliga, que es estar en primer lugar con las personas en el momento oportuno y acompañarlas en lo que implica este trauma', respondió Saball.
'Más aún, en mayo, en ambas situaciones hemos publicado el llamado a la postulación respecto de los subsidios para reparar, reponer y reconstruir en cada uno de los lugares. Esos llamados están en curso, se están produciendo los primeras postulaciones y el primer resultado lo veremos el 30 de junio', indicó.
Godoy puso sobre la mesa la situación de las casas de emergencia en Valparaíso, las cuales sufrieron filtraciones durante el temporal de la semana pasada, y denunció que la mayoría de ellas no cuentan con baños y servicios básicos, ejemplificando con el caso de Karina, una porteña que vive con su hijo de 11 meses en esas condiciones.
'Es lamentable que tengamos que exponer con nombre y apellido. Las viviendas de emergencia son eso, de emergencia. Nadie quiere que un chileno viva en una vivienda de emergencia, pero pongamos las cosas en contexto', pidió, junto con aclarar que fueron los propios vecinos quienes aceptaron esa solución y quedarse en los cerros, por sobre las otras tres que el Ejecutivo ofreció, como subsidios para arriendo o reubicación.
El vocero de gobierno, Álvaro Elizalde, acompañó a Saball y criticó el uso político que se le estaba dando a la interpelación.
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