El trabajo es el lugar en el que los adultos pasan más horas al día, por lo tanto, es también un sitio en el que se debe procurar tener acceso hábitos saludables.
El objetivo es, entre otras cosas, que las personas realicen bien sus tareas, favorezcan la productividad y se desempeñen contentos.
En Chile, como en la mayoría de los países, la jornada de trabajo está estructurada en torno a las comidas o colaciones: descansos para el café, horas de almuerzo, pausas para la once y visitas al dispensador de agua. Cualquiera que haya realizado una jornada laboral de ocho o doce horas sabe lo que se siente al final del día.
Según advierten los especialistas, una persona mal alimentada encontrará dificultades para mejorar su calidad de vida, dado que la capacidad de trabajo, directamente proporcional a la alimentación, irá descendiendo cuando ésta es deficiente y, en lo que a esfuerzo físico de refiere, puede llegar a disminuir hasta un 30% respecto al desarrollo normal.
La nutricionista Vanessa Vergara explica que 'una alimentación monótona, repetitiva o en la que faltan alimentos indispensables para nuestro cuerpo puede dar lugar a la aparición de determinados síntomas tanto físicos, como cansancio excesivo o falta de reflejos, y psíquicos, tales como la falta de interés o irritabilidad, todas situaciones que mejoran mediante una buena alimentación'.
Conscientes de esto algunas empresas han tomado decisiones pioneras, alentando a sus funcionarios para que mejoren sus hábitos alimenticios y comprendan la importancia de ejercitarse.
EXPERIENCIA LOCAL
Cada vez son más las empresas que asumen el desafío de apuntar a la mejora en la calidad de vida de sus trabajadores.
Una de las que ha logrado resultados positivos es la Constructora e Inmobiliaria Aitue, donde 30 de colaboradores participaron durante seis meses en la iniciativa Concurso Vida Sana.
El programa, que concluyó recientemente, se sustentó en la promoción interna de una alimentación más saludable, prácticas deportivas y el cuidado de la salud personal.
Una charla introductoria a cargo de nutricionistas de la Universidad del Desarrollo, fue la encargada de dar inicio a la actividad, en la que se procedió a registrar el peso y porcentaje de grasa corporal de los voluntarios del programa.
Posteriormente se realizó un monitoreo mensual de estos factores, y durante ese período las gerencias de ambas compañías desarrollaron actividades para incentivar los progresos individuales de los colaboradores.
Finalmente, los expertos en nutrición de la universidad repitieron los exámenes originales, comprobando el progreso registrado luego de lapso en que prolongó el programa.
RESULTADOS POSITIVOS
A nivel de peso corporal, el mejor registro anotó una disminución de 9,9 kilos, mientras que en el descenso de masa corporal, el mayor porcentaje logrado entre los participantes fue de 9,68%.
Según destacó el gerente general de Inmobiliaria Aitue, Rodrigo López, 'el éxito de la iniciativa está en que además de promover una vida más sana, profundiza los lazos entre los colaboradores de la empresa. Se generó un ambiente bien positivo en torno al concurso, que a poco andar pasó de ser un desafío personal'.
Adicionalmente, Javier Prussing, gerente general de Constructora Aitue, hizo hincapié en que 'estas prácticas saludables no se limitan a nuestra participación en la iniciativa, se incorporan a nuestros hábitos diarios y cultura. Todos aprendimos bastante sobre nutrición saludable y comprendimos que con pequeñas acciones se pueden lograr importantes cambios', concluyó.
La capacidad de trabajo, directamente proporcional a la alimentación, irá