Comida hecha en casa aún es la mejor opción
Por constanza saavedra
Los colorantes artificiales -obtenidos bajo procesos químicos- que logran hacer que los productos se vean más atractivos y agradables a la vista, generando el interés por consumirlos, durante muchos años han generado controversia. 'Claramente si vamos al supermercado y vemos una comida descolorida y de mal aspecto no vamos a estar interesados en comprarlo, a diferencia de cuando estamos frente a uno de un tono brillante, que llama mucho más la atención', afirma Andrea Castro.
Uno de los más populares acentuadores del sabor es el Glutamato Monosódico (en supermercados se encuentra con el nombre de Ajinomoto), presente en sopas deshidratadas en sobre o en vaso, pastillas de caldo y comidas chinas. La nutricionista Andrea Castro, explicó que 'hace muchos años la controversia sobre este componente estuvo vinculada al efecto conocido como Síndrome del Restaurant Chino, donde se afirmaba que determinados síntomas -como sudoración excesiva, náuseas, dolores de cabeza y diarrea- tenían su raíz en el Glutamato Monosódico que es el que da el sabor característico a estas preparaciones'.
Al tomar una refrescante bebida de fantasía o saborizar con salsas una comida, preocuparse por los componentes con los que fueron elaborados pasa a segundo plano. Así es el caso del Aceite Vegetal Bromado, que ha desatado discusiones a nivel mundial por sus posibles riesgos para la salud.
Caramelos, mostaza, bebidas, mermeladas
El dulzor es un factor en el que se involucran componentes permanentemente cuestionados. Uno de ellos es el Jarabe de Maíz de Alta Fructosa, edulcorante líquido caracterizado por su alta capacidad de aportar dulzor, lo que significa un considerable beneficio económico para las industrias alimenticias. Sin embargo, Andrea Castro recalcó que 'desde hace varios años se viene relacionado el Jarabe de Maíz de Fructosa con el problema mundial de la obesidad, puesto que sus concentraciones representan una muy buena fuente calórica. Y hay que entender que además hace que los alimentos sean mucho más sabrosos, por lo que es muy común ver que los niños, en vez de beber un vaso de agua o jugos naturales, prefieran tomar bebidas de fantasía'.
Recientemente, el debate ha estado en torno al Aceite Vegetal Bromado, componente que se utiliza para estabilizar el sabor de las bebidas de fantasía y energéticas. A pesar de que son de origen vegetal (maíz o soya), son sometidos a tratamientos de bromación, 'lo que significa que este átomo de Bromo se integra en el ácido graso con el objetivo de funcionar como emulsionante, lo que permite que el sabor -especialmente cítrico- de la bebida se mantenga en el tiempo', aclaró Daniel Sandoval.