El ex diputado y ahora consejero regional electo de la DC cuestionó la incorporación de más partidos a la Concertación.
Con gafas oscuras. Así habló el demócrata cristiano, ex diputado y ex regidor penquista, Edmundo Salas de la Fuente. La recomendación vino de su médico, tras ser intervenido el jueves pasado por cataratas en su ojo izquierdo, enfermedad que le impedía en ocasiones ver nítidamente y que, desde su descripción, era "como tener una basurita en el ojo".
Pero hoy, Salas ve todo con claridad. Sobre todo cuando, a partir de marzo, forme parte del Core. Este es su regreso a la política, luego de ejercer como diputado por cuatro periodos en el distrito 45, y haber perdido en las últimas dos elecciones, en el distrito 45 y en Arauco. Dijo que volvió en 2013 por la invitación de su partido y porque "echaba de menos la política".
En esa nitidez y siendo parte hoy de la Nueva Mayoría, Salas manifestó no estar satisfecho con la formación política que se ha alcanzado. Principalmente, porque siendo fundador de la Concertación, cree que se transgredió el compromiso de no aceptar a más partidos en el conglomerado. Aclaró, eso sí, que la actual conformación obedece al cumplimiento del acuerdo en torno a un nuevo proyecto de gobierno, el que espera se cumpla. En ese sentido, estos próximos cuatro años serían una prueba.
Pero, el temor de Salas sigue: "Si estos partidos mañana no cumplen con lo que ellos prometieron, se quieren arrancar con los tarros y quieren empezar a sacar provecho para formar un partido mas grande, yo creo que en ese momento ese partido tiene que ser expulsado. Tienen que reunirse seriamente y decir ya no va más".
-Yo tengo temor conociendo a las personas, a la gente que, como en la elección anterior, perdimos por el personalismo. Algunos se retiraron, otro quería ser presidente de Chile y formó un partido, le creen mas a los gobiernos de fuera que a los mismos.
-A Alejandro Navarro. Estas cosas e olvidan, pero perdimos el doblaje en el 45 porque Navarro en ese tiempo crucial para tener otro gobierno, llevó dos candidatos que sacaron 15 mil votos.
Para Edmundo Salas, el problema es mucho más simple: "Los partidos tienen que existir. Los partidos ni la política es la mala, son las personas. Es ese afán de tener rápidamente lo que nunca tuvieron, el afán de poder, de poner el pie encima. Eso hay que terminarlo. Así, podría haber muchos partidos", dijo.
Hoy, a diferencia de otros tiempos de lucha, considera que se han recuperado libertades, pero olvidado deberes, y en esta línea, los propios partidos han caído en personalismos que no le agradan.
Y, aunque reconoce que prefiere alianzas más pequeñas, un cambio, indicó, es necesario. Pero, "siempre que los acuerdos se cumplan".
-Se formó una alianza más amplia, y tienen que cumplir el programa que prometieron. Pero, si lo hubiéramos pensado, todos quieren ser jefes, caciques, gerentes. Si eso no fuera así, no deberíamos crear tantos partidos políticos y nos podríamos entender mejor. Si tres personas no se entienden, imagínese tantos partidos... menos.
-Esto es una prueba, a ver si siete partidos pueden hacer las cosas que estamos pensando en este Chile y mundo de hoy. Si no se cumple, hay que buscar otra alternativa. Pero, ahora no hay tanta. Porque hay un problema económico, social, de entendimiento. Que todos quieren ser caciques.
-Lo veo, porque hay grupos. Con orgullo digo que nunca pertenecí a algún grupo. Y cuando había nueva directiva, la apoyaba, sea cual fuera. Pero hoy hay grupos que quieren cambiar, que quieren refundar.
-Lo primero que hay que hacer es clarificar muchas cosas. Cómo vamos a hacer una reforma tributaria. No se trata de talar todo el bosque y plantar de nuevo. En segundo lugar, ver cuánto nos cuesta la educación. Qué educación vamos a tener, porque yo no estoy de acuerdo con la educación gratuita para todos.
-Hay que aterrizar los pensamientos y deseos más extremos de cada uno. Hay que pensar que por no ponernos de acuerdo terminamos en dictadura. Lo que nos pasa es producto de 17 años de dictadura. Hay que recomponer ese tejido social. Hay que repensar, como recuperamos la decencia de nuestro país, la honestidad, el deseo de cambiar.
-Si nos va mal desaparecen los partidos políticos. Estos años son importantes por eso. Hoy hay jóvenes, y en 4 años mas quizá quieran participar del gobierno.
Sebastián Piñera, desde la visión de Salas, pudo haber hecho mucho más en su gobierno. De hecho, el consejero electo considera que "Piñera se farreó este gobierno y la derecha", ya que pudo haber trabajado en importantes cambios, por ejemplo constitucionales y educativos sin grandes dificultades. Pero, tuvo obstáculos.
El problema que existió, indicó, fue una marcada lucha de poderes entre los partidos gobernantes (RN y UDI), una falta de cercanía con la ciudadanía y una necesidad de hacer y concretar, más que difundir logros.
Pero, lo más grave fue que el rol del Estado "ha sido nulo. La derecha tiene miedo a que el Estado se involucre en la parte económica del país", indicó el futuro consejero regional.