La Ucsc enfrenta mañana de local por la Liga A1 a sexteto capitalino que nunca ha perdido.
El de mañana debe ser el partido más atractivo de la Liga Nacional de Vóleibol A1 y lo animará nada menos que la Universidad Católica de la Santísima Concepción, nuestro representante regional en la competencia masculina.
Resulta que su rival es el Thomas Morus, equipo capitalino de corta vida que tiene una particularidad: jamás ha perdido. Durante el primer semestre debutó en la Liga A2, salió campeón invicto y subió a la A1. Y ahora llega con cinco victorias a cuestas en igual número de partidos (3-2 al Manquehue, 3-0 a Universidad Católica, 3-0 y 3-1 a Doñihue y 3-0 a Río Bueno).
Lindo desafío para la Ucsc, escuadra que luce tres triunfos (3-1 a Doñihue, 3-0 a la Selección Menor y 3-2 a San Felipe de Aconcagua) y sólo una derrota (0-3 con Linares). El choque será mañana en el campus San Andrés a las 15.30 horas y ya lo palpita el emblemático punta receptor del equipo, David Ciatera.
"El Thomas Morus es el equipo más fuerte del campeonato porque tiene a varios seleccionados nacionales adultos. Pero hasta ahora ha enfrentado a equipos no tan potentes. Y así como nosotros sabemos que son candidatos, ellos también saben que nosotros somos un rival de respeto pese a que no tenemos tanta competencia como sí ocurre en Santiago. Por eso creo que será un lindo desafío", comenta el alumno de Ingeniería Civil Industrial de la Ucsc.
El hecho de jugar en el inexpugnable feudo del campus San Andrés es otro plus. "Si jugamos en nuestra casa, donde estamos invictos en esta Liga, nos motiva aún mucho más. Jugar en el campus San Andrés es como jugar en el patio de tu casa. Sería muy bueno ganarles porque además de quitarles el invicto nos dispararía en confianza".
En la visita figuran, de hecho, los experimentados hermanos Parraguirre (Tomás, Matías y Vicente), a quienes la Ucsc ya enfrentó cuando ellos jugaban por la UC. "Son rivales a los que ya conocemos y sabemos su estilo de juego", añade.
En cuanto al propio equipo, David aclara que "este año igual ha sido algo accidentado por el tema de las lesiones, pero además el fin de semana pasado se nos lesionó el refuerzo colombiano Christian Murillo (esguince de rodilla), así que será baja para los dos partidos. Por eso lo importante es entrenar y cuidar a los que ya están resentidos como es el caso de Guillermo (Jiménez) y Marcelo (Santos)".
El domingo, en tanto, también en el campus San Andrés (15.30), la escuadra de Julio Orellana recibirá a Unión San Felipe. "Es un equipo parecido al otro de esa zona (San Felipe de Aconcagua) y que también se reforzó de manera adecuada. No tiene el nivel de otros pero no por eso lo vamos a mirar en menos. Por supuesto, también tiene nuestro respeto", finaliza.